Opinión. El atraso de políticas anti exportadoras se manifiesta en algunos números comparativos, sin ir más lejos, con nuestros socios del Mercosur.
Raúl A. Martina
Ingeniero Agrónomo M.P. 1442
Asesor Fitosanitario Provincial
El U.S.D.A. (Departamento de Agricultura de los Estados Unidos) ha pronosticado una cosecha de maíz de más de 380 millones de toneladas, lo que posiciona a esta cosecha como la tercera mayor en la historia de los EE. UU. A raíz de este pronóstico, los contratos futuros de soja y maíz en la Bolsa de Chicago han caído a su nivel más bajo en cuatro años. Este descenso en los precios sigue el informe de oferta y demanda en EE. UU., que proyecta una producción récord. En términos reales, el precio de la soja ha descendido a su valor más bajo en 18 años, ajustado por la devaluación y la inflación en ese país.
La soja tiene una relevancia crucial en nuestro país, no solo por las exportaciones, sino también por la importancia de sus derivados industriales como la harina y el aceite, considerando que el complejo aceitero argentino es uno de los más grandes del mundo.
En el ámbito de la oferta y demanda mundial de los principales granos exportables, el informe del U.S.D.A. es siempre un análisis de referencia. Hoy, detrás de este informe, las expectativas señalan una fuerte oferta mundial tanto de soja como de maíz.
Al analizar uno de los índices microeconómicos más utilizados por asesores y productores, el Margen Bruto, la cuenta es clara: los ingresos brutos, restados los costos directos de producción, nos dan una idea clara del esfuerzo realizado desde la planificación de la siembra hasta el pesaje final del grano, ya sea para almacenarlo en silobolsas o para venderlo y cubrir los insumos y alquileres necesarios para que el ciclo productivo vuelva a arrancar el próximo año.
El productor argentino sabe bien que no puede influir directamente sobre el precio de los commodities, que es determinado por la oferta y la demanda mundial. Sin embargo, nuestro país se ha quedado rezagado en términos de volúmenes de producción en comparación con nuestros vecinos. Por lo tanto, para mejorar el Margen Bruto, el camino a seguir es aumentar los rendimientos de los cultivos, lo que ineludiblemente depende del aporte constante de más y mejor tecnología aplicada al proceso productivo.
Es en este punto donde debo destacar una preocupación: la falta de avance en Tecnologías de Producción. En años anteriores, cuestiones ideológicas frenaron el ingreso e intercambio de nuevos conocimientos y avances en biotecnología, bioingeniería, robótica y manejo satelital de sitio específico. Aquellos que trabajamos diariamente en el campo sufrimos la falta de conectividad en diversas zonas del país, lo que resulta en la pérdida de información en tiempo real, tan crucial para optimizar la producción.
En otro lado del globo un Departamento de Agricultura genera aportes en materia de mercados y tendencias que capturan la atención global. Es evidente que lo que necesita el campo argentino es menos intervención estatal agobiando con impuestos distorsivos, como las retenciones, y más apertura, intercambio y oportunidades reales de progreso sin tantas trabas y regulaciones recaudatorias.
Con una nueva campaña productiva a la vuelta de la esquina, enfrentamos numerosas variables inestables. Para cerrar esta columna, quiero recordar una frase del licenciado en Administración de Empresas, Claudio Zuchovicki: "Para los argentinos, no hay peor dolor que el soportable... y lo incierto es peor que lo malo".
La Sociedad Rural Argentina expresa su preocupación por el retraso en los precios de la ganadería en relación con la inflación.
El sector agroindustrial argentino continúa fortaleciéndose. La molienda del complejo aceitero nacional repuntó en septiembre, impulsada por la entrada de 633 mil toneladas de soja desde Paraguay, Bolivia, Brasil y Uruguay.
Es ciertamente inimaginable hoy en Argentina lograr lo que Kip Cullers, productor agropecuario de Missouri, alcanzó en su chacra: un rendimiento récord del cultivo de soja de 104 quintales por hectárea.
El sector agrícola argentino tiene alrededor del 80 % de sus costos dolarizados. El nuevo gobierno plantea escenarios totalmente distintos para la producción agrícola.
“Sentimos la necesidad de pedirle al presidente y su equipo que empiecen a trabajar en la recuperación del país”
El campo quiere seguir colaborando, poniendo el hombro como siempre y acompañando el futuro de nuestro país.
El noble cultivo de maíz es uno de los recursos más importantes del sistema agroalimentario del Centro Oeste provincial.
Según el USDA, la siembra de la oleaginosa ha llegado a su fin y el 50% de la oleaginosa cultivada se encontraría floreciendo.
El fiscal Alejandro Carballo dispuso la libertad de la imputada, al modificar la carátula a homicidio en emoción violenta.
Con el pago único anual se accede a grandes descuentos.
El evento de velas contará con grandes atractivos propuestas. Será el sábado 25 de enero en las aguas del lago Piedras Moras. Las inscripciones están abiertas y ya hay anotados unos 120 participantes.
Sociales de Río Tercero.
Los alimentos subieron fuerte en diciembre, y se espera que se estabilicen para enero
La suba de precios de los alimentos y las bebidas fue de 4,64 por ciento en diciembre, duplicando el índice del mes anterior en Córdoba.