COVID-19: "Si se aprueba una nueva técnica podríamos hacer los análisis aquí muy pronto"

Desde esta semana los laboratorios privados de Río Tercero están habilitados para tomar las muestras que luego permiten realizar los test de coronavirus. Aunque los análisis se continúan llevando a cabo en el ámbito de la salud pública y en solo tres laboratorios privados de la ciudad de Córdoba (en esta provincia), esto permitirá acelerar los plazos para obtener resultados. Así lo indicó Diego Colussi, presidente del Círculo Regional de Bioquímicos de Río Tercero.
 El profesional explicó también que si la ANMAT (Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica) aprueba una nueva metodología para hacer los test que permite detectar la enfermedad -desarrollada por el CONICET-, en poco tiempo los laboratorios de la ciudad también podrían realizar la prueba.
 En un extenso diálogo que mantuvo con TRIBUNA, Colussi detalló cuál es el protocolo que se sigue para la realización de los test de coronavirus, la importancia de que el sector privado haya sido incluido y sobre la posibilidad de que los análisis puedan efectuarse en la ciudad.

 -¿Los laboratorios privados de la ciudad están en condiciones de hacer los hisopados?
 -Sí, desde esta semana estamos en condiciones de tomar las muestras y derivarlas a laboratorios privados que están realizando el estudio. Hasta la semana pasada se canalizaba todo a través de Salud Pública, entonces quienes tuvieran un caso sospechoso y encuadrara bajo los criterios establecidos para serlo, se les realizaba el hisopado nasofaríngeo, se enviaba vía Hospital Provincial hacia el Laboratorio Central de Córdoba y desde allí, al principio, se enviaban al Instituto Malbrán. Luego, cuando el Laboratorio Central puso a punto la técnica, los comenzó a hacer en sus instalaciones. Cuando el Laboratorio Central comenzó a verse desbordado por la cantidad de muestras, descentralizó y comenzaron a hacerse en la Facultad de Ciencias Químicas y en algunos laboratorios privados, pero siempre canalizado a través de Salud Pública. Ahora, también alineados con los criterios de Salud Pública y con los del Ministerio de Salud la Nación, los laboratorios privados podemos tomar las muestras. En este caso el médico tiene que generar un RP (pedido médico), indicando que es un caso sospechoso, se llena una planilla epidemiológica y con eso se pide un turno a cualquiera de los laboratorios para que le hagan la toma de muestra y el correspondiente envío a los laboratorios privados de Córdoba que lo están realizando y que por ahora son muy pocos: el del Instituto Oulton, el del Hospital Privado y el del Sanatorio Allende.

 -¿Hay posibilidades de que los test para detectar la enfermedad se puedan realizar en laboratorios de Río Tercero?
 -Mientras la única técnica habilitada sea la de búsqueda de material genético (RT-PCR) del virus, son muy pocos los laboratorios en el país que pueden hacerlo; en Córdoba solo dos o tres. Esta semana fue aprobada otra tecnología con la cual entonces sí los laboratorios de Río Tercero vamos a poder hacerlos. Pero será para mediciones de anticuerpos. Se llaman test rápidos, con resultados a los 15 minutos pero no sirven para diagnosticar la enfermedad; son más bien para estudios científicos desde el punto de vista epidemiológico.

 -¿Y quién autoriza esas otras tecnologías que usted menciona?
 -La ANMAT es la que debe aprobar esas otras metodologías que hay para diagnóstico y que están recientemente ingresando al país. Una vez que estén disponibles para la comercialización los laboratorios de la zona podremos ponerlas en marcha.

 -¿Para poder poner en marcha estas otras metodologías, los laboratorios tendrán que realizar una gran inversión?
 -En principio no, porque no se requiere de metodología física en las que los laboratorios tengan que invertir y que sea diferente a la que ya contamos. En lo que sí hay que invertir es en la compra de los kits. Aún no sabemos cuánto van a costar, pero generalmente vienen para hacer, por ejemplo, 100 determinaciones.

Entonces para que los laboratorios realmente puedan amortizar esas 100 determinaciones deberían al menos hacer 100 análisis, porque si no se desperdiciaría la otra parte. Eso luego lo analizará cada laboratorio de acuerdo al flujo de pacientes que cada uno tiene.

 -¿Se ha establecido el tiempo que demorarían estas otras metodologías en ser aprobadas por la ANMAT?
 -Hay dos situaciones: hay un kit con altas probabilidades de que se apruebe por todos los resultados previos que está teniendo y que es desarrollado en la Argentina por el CONICET. Si eso ocurre, creen que estarían disponibles en aproximadamente un mes. Pero hay también otra opción y son los kits que se están importando, como los llegados de China. Lo que ocurre es que se están realizando pruebas para determinar si son de alta sensibilidad y especificidad para validar esas pruebas. Y además hay que determinar si estos kits sirven para diagnóstico o si solamente sirven para detectar que un paciente, por ejemplo, haya tenido contacto con el virus, pero no necesariamente que esté transitando en  ese momento la enfermedad. El kit del CONICET sirve para buscar el virus; los que vienen del exterior son  para buscar anticuerpos, que son sustancias que el organismo liberó o generó en respuesta a una infección por el virus y que podrían aparecer algunos días después de que el paciente ya está infectado. Detectar anticuerpos no necesariamente quiere decir que se está cursando la infección; lo que sí dice es que se ha tenido contacto con el virus, pero no se sabe cómo ni cuándo. Puede ocurrir entonces que haya pacientes sanos, ya recuperados y que igualmente estas técnicas den positivo porque quedaron como marcadores de contacto con el virus.

 -¿Según su opinión profesional, cuál test sería mejor?
 -Para diagnosticar la enfermedad el que está desarrollando el CONICET sin dudas. Porque este es para detección del antígeno, del virus. 
 -El hecho de que laboratorios locales pudieran realizar los test contribuiría a acelerar los diagnósticos.
 -Ya el hecho de poder contar con la opción de derivarlos a laboratorios privados acelera muchísimo, porque no hay necesidad de pasar por todo el protocolo para ver si te toman la muestra.

 -¿Cuál es el plazo estimado para contar actualmente con los resultados de un test?
 -Un máximo de 48 horas en un laboratorio privado. Por la vía pública, como está tan saturada, puede demorar algunos días más. La descentralización en laboratorios del país acortó los tiempos, obviamente que si entramos a otra fase de poder realizarlos en Río Tercero, por ejemplo, tendríamos los resultados en el mismo día.

 -¿Cuál es la posibilidad en una ciudad como la nuestra de hacer hisopados masivos? ¿Sería recomendable?
 -Si los recursos estuvieran dados como para hacer hisopados masivos, quizás sería una buena medida, pero hay que pensar que a pesar de que ha entrado una importante cantidad de kits para hacer muchos test, si se hiciera de forma masiva no alcanzarían. Entonces, si en un mes necesitáramos hacerle el estudio a personas de las cuales se tiene sospecha de la enfermedad, no contaríamos con el recurso porque se gastaron todos. Hacer una buena cantidad (de test) ayuda pero hay que ser conscientes de llegar a un equilibrio entre el uso y la disponibilidad del recurso. En este sentido creo que las autoridades se están manejando con mucha cautela