Radio T

AGRO. Vientos de agosto...

Columna de opinión del ingeniero agrónomo Raúl Martina (M.P. 1442)

Locales 05/08/2023 Tribuna Tribuna
AGRO Productores

Llega agosto y con los vientos en el centro de la escena, se preparan un sinnúmero de cambios que van generando el anticipo del tiempo de las siembras que llegarán en la primavera.

Agosto marca el inicio del cambio. No es simple casualidad que en este mes celebremos el día del ingeniero agrónomo y del médico veterinario; un 6 de agosto de 1959 fue instituido como “El día de la Enseñanza Agropecuaria”, en conmemoración del inicio de dictado de clases en la escuela de agronomía y veterinaria de la provincia de Buenos Aires, primera escuela de enseñanza agropecuaria fundada en 1883.
 

Los ingenieros agrónomos tenemos un rol socio productivo muy especial en nuestros pueblos del interior, y considero que el campo siempre va a ser parte de la solución de los problemas que tiene el país, nunca una traba, por el contrario, siete de cada diez dólares o divisas que ingresan al país se originan en el campo. Por tanto si desde lo productivo estamos presentes con aportes interesantes, considero que el desafío es estar presentes en la actividad social, cultural y política de nuestros entornos comunitarios, ya que muchas decisiones que nos involucran las toman actores que desconocen cómo funciona el sistema socio productivo de nuestros pueblos del interior.

Si tenemos en cuenta el contexto global, el crecimiento económico de China y los países del sudeste asiático, la expansión en la demanda por biocombustibles, la guerra entre Ucrania y Rusia que se prolonga y genera desencajes del mercado a nivel mundial, claramente Argentina por su potencial, debe mantenerse a la altura de semejante desafío ya que no son muchos los países con posibilidades ciertas de producir grano y carnes como el nuestro. Sumado a ello las potencialidades claras en materia energética florecientes en Vaca Muerta. 

Lamentablemente, un gobierno como el actual que lleva adelante políticas de intervención de mercado y distorsiona la relación cambiaria, solo nos ubica en un escenario de estancamiento y el sector agropecuario no es ajeno a ello. Podríamos vencer la barrera de los 130 millones de toneladas con mayor apertura hacia el mundo y el ingreso de mucha más biotecnología e intercambio de ideas y negocios. La desconfianza retrae y solo nos atrinchera a la espera de cambios serios, concisos y claros.

Hoy es momento de participar y hacer nuestros aportes. En tiempos de elecciones, votar es un derecho que hay que hacer valer, como forma madura de entender las reglas de la democracia. No participar, porque existe desilusión, no nos sacará del estado en el que estamos. La mejor manera de torcer el rumbo es manifestando en las urnas el cambio necesario y responsable que nos debemos.

Para cerrar mi columna voy a citar en primer lugar la expresión de una idea sobre las cosas del campo, escrita por un amante defensor de la naturaleza y creador de nuestra Bandera Nacional, Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano: “La agricultura es el verdadero destino del hombre”. Y, en segundo lugar, rescato el aporte de una noble mujer que en estos días reivindicaron su lucha en los entornos políticos partidarios, quien abrió surcos dentro de un ámbito desafiante en momentos difíciles, donde debíamos consolidar la democracia para tiempos futuros. Fue maestra de vocación, abogada por elección y política por pasión, electa diputada nacional por la Capital Federal (1983- 1991) destacando su laboriosa participación como afiliada, quien supo consolidar las bases para el reconocimiento de los derechos de la mujer, el respeto por la diversidad, y la igualdad de oportunidades y participación. A modo de cierre les entrego una frase que sintetiza su legado: “Mientras tenga una mente libre para la duda, un corazón para amar y un alma para soñar, la vida será siempre para mí, la más apasionante de las aventuras”. Agradecido por siempre, María Florentina Gómez Miranda.

Te puede interesar
Lo más visto