Nuevo gabinete y presupuesto, sin certezas hasta después de las elecciones

La incertidumbre electoral estiró  las definiciones en dos aspectos clave de la gestión municipal: la conformación del nuevo gabinete que deberá asumir en diciembre comenzando el nuevo período de cuatro años del intendente Marcos Ferrer, y el presupuesto para 2024. 

El esquema de colaboradores traerá varias novedades a las ya conocidas, pero nada está cerrado, ya que dependerá del clima económico que surja con el resultado de las elecciones: no será lo mismo un triunfo de Sergio Massa que de Javier Milei en la segunda vuelta del 19 de noviembre.

Sin embargo, en ambos casos, el intendente Ferrer aportó una certeza en un diálogo exclusivo con TRIBUNA: la estructura será más chica, con menos secretarías, que bajarán de rango a direcciones o áreas. En ese lote se menciona a Cultura, Educación, Comunicación y probablemente Obras Públicas. Para Ferrer los cambios implicarán un ahorro de recursos administrativos y de funcionamiento interno, pero no presupuestarios.

Sobre el presupuesto general, las decisiones serán más complejas. El Ejecutivo tiene como plazo máximo el 31 de octubre para presentarlo ante el Concejo Deliberante. El proyecto, que irá junto a las ordenanzas Tarifaria e Impositiva, planteará un esquema que sufrirá, seguramente, varios cambios para el tratamiento en segunda lectura, con modificaciones e incorporaciones, no solo en los ingresos o gastos previstos, sino en el valor que tendrán las tasas y en algún mecanismo de ajuste por inflación. 

“Voy a tratar de achicar la cantidad de secretarías. La estructura administrativa se puede ajustar un poco y seguir siendo eficiente. Hay muchas áreas que no requieren ser secretarías para tener el mismo presupuesto. Desde ese lugar se pueden ordenar estructuralmente de manera más sencilla. Hay secretarías que se van a convertir en direcciones. Todavía no tengo una definición clara, respecto de cuáles. Me parece que así se puede producir un ahorro en el gasto de la política. Después hay gente de mi equipo que seguirá y veremos quiénes se incorporan. Hemos trabajado muy bien en estos cuatro años y la gente lo avaló con la continuidad”, destacó Ferrer. 

“Tanto Cultura como Deportes y Comunicación están en análisis para que se conviertan en direcciones. Me parece incluso razonable que lo sean, para cuidar las cuentas municipales”, agregó el intendente reelecto.

-¿Cómo está el panorama económico del Municipio?
   -Hoy estamos bien, no estamos mal, el Municipio está equilibrado. No tiramos manteca al techo. Pero estamos equilibrados. Y la verdad no sé a qué Argentina nos vamos a enfrentar en 2024. Los índices de inflación siguen subiendo. No veo en el corto plazo una solución a este tema, con lo cual tenemos que prepararnos para un inicio de 2024 con una alta inflación, a pesar que se tomen medidas correctivas. Y luego vendrá un ajuste, gane quien gane la elección, porque de lo contrario llegará una hiperinflación. Frente a eso debemos ir armando un anticuerpo.

-¿Se reflejará en el presupuesto?
   -Probablemente no ahora en octubre, porque tenemos un límite para presentarlo este mes (ante el Concejo Deliberante). Pero para la segunda lectura tendrá modificaciones profundas, y vendrán los achiques o el reacomodamiento de partidas.

-Incluyendo el ajuste de las tasas.
   -Es un tema que venimos trabajando. Hay que pensar que este año aumentamos las tasas municipales en un 60 por ciento, y estamos terminando el año con un 150 por ciento de inflación y si se mide en alimentos 180 por ciento. Es decir el triple de lo que habíamos calculado. Vamos a tener que ir hacia un esquema que siga la inflación o buscar un mecanismo de actualización, por lo menos hasta que se controle la inflación. De lo contrario podemos quedar muy atrasados porque los servicios aumentan: la recolección de residuos, el agua, los sueldos, combustibles para mover el equipamiento para reparar una calle, aumentan las luminarias… Entonces hay que buscar una forma de ir a una actualización. 

-Con este panorama, ¿qué esperás para 2024 más allá de la cautela y la incertidumbre? ¿Seguir con el plan de obras?
   -Venimos con un plan de obras. Seguramente vamos a crear fondos específicos para obras. Uno de ellos para la remodelación del casco céntrico, que es una demanda grande del sector comercial que vive en el centro, y de toda la comunidad. Encarar la obra de la plaza San Martín, que también está vinculada con la remodelación del casco céntrico. Todo va en la misma línea. Hay desafíos en distintos barrios, con el compromiso de 100 por ciento luces led. Se nos está complicando porque todos los componentes son a valor dólar. No solo no se consigue precio sino que no se puede importar directamente. Nosotros asumimos la gestión con ocho mil luminarias y ya las ocho mil fueron reemplazadas por led. Pero faltan más porque dentro del recambio que hicimos fuimos agregando. Ya hay 10 mil luces. Vamos a seguir con el programa de acceso barrial, que es una calle o dos pavimentadas en cada barrio. Y luego esperar qué tipo de negociación podemos hacer con el Gobierno nacional, según quien sea el presidente. Igual con el Gobierno provincial, para las obras. Con Martín (Llaryora, gobernador electo) he tenido algunas conversaciones. Hay compromisos de trabajar en conjunto. Hay obras para continuar, con la del balneario, que tiene que seguir. Además de otros objetivos comunes como la universidad, que seguramente alguna injerencia vamos a tener. Hay muchas cosas por hacer.