-¿Qué impresión le dejaron los anuncios económicos del nuevo ministro Sergio Massa?

-Las medidas apuntan a no salirse del camino. No hay nada extraordinario. 

-No planteó ningún cambio estructural. 
-No lo hizo, no. Ni tampoco de importancia en la macropolítica del Gobierno (nacional). Creo que (Massa) se sujeta en algunas reglas. No se va a ir por la banquina. El congelamiento del ingreso de empleados públicos es un gesto, aunque no es una solución a ningún problema. Entiendo que hay un plan de corto plazo, de contingencia. El objetivo principal es tratar de recuperar las reservas (del Banco Central). Dentro del espanto que es el Gobierno nacional, ha logrado unir las cabezas de Cristina, Alberto y la de él como para dar alguna señal. No sabemos si el camino es bueno o malo. Es lógico que no hay un plan económico. Todo lo que se hace es un maquillaje. Entiendo que irá a una devaluación del dólar oficial. Lo terminó diciendo con otras palabras. Hay que estar atentos porque probablemente se traslade a los precios. 

-No hubo anuncios sobre las retenciones al campo.
-Lamentablemente habló sobre que no va a tocar las retenciones. Con lo cual todo lo que plantean que es pedirle a los sectores productivos que liquiden los granos y demás, es muy difícil que ocurra con el valor del dólar oficial y las retenciones o derechos de exportación. 

-Más allá de la cuestión económica se plantea un cambio de rumbo político del gobierno.
-Claramente Massa no es un técnico en economía; es un abogado.

“La posibilidad real de competir en Río Tercero depende más de mí que de cualquier otra cuestión”

-¿Cómo repercute esta nueva etapa del gobierno en la estrategia de Juntos por el Cambio?
-Juntos por el Cambio debe tener la inteligencia de entender que en el proceso que viene debemos estar todos juntos. Las mezquindades o vanidades personales; es decir quién quiere ser candidato, hay que tratar de dejarlo a un costado. Debemos sentarnos en una mesa y trabajar sobre una coalición seria. Si tenemos la oportunidad de gobernar en 2023, el estado en que vamos a recibir el país es catastrófico, con todas las variables distorsionadas. No solo hay una crisis económica, sino que no hay correcciones estructurales. Habrá un dólar atrasado; una altísima inflación; todos los sectores productivos castigados por impuestos al punto límite. Claramente habrá que achicar el gasto, que es una discusión que el gobierno no quiere dar. Lo máximo que se atreven a decir es que van a ordenar los planes sociales. Ordenar es una palabra muy relativa, porque lo que hay que hacer es terminar con los planes sociales. Será paulatinamente, con algún proceso, pero lo que no se puede permitir es ver a personas que se jactan de cobrar planes sin trabajar. Cuando un plan social hace que la persona decida no buscar un trabajo en función de la comodidad que le genera, ese plan no está funcionando para insertarla en el mercado laboral. No puede ser que cobren más que un jubilado que aportó cuarenta años de su vida, y que percibe la mínima para pagar la farmacia. Es una locura. A eso le sumamos que hay sectores del gobierno que están pidiendo un salario universal. 

-Son dos visiones de país.
-Hay dos Argentina: los que creemos que necesitamos un país ordenado que genere oportunidades achicando el gasto, y los que creen que el Estado no se funde nunca y pueden tirar plata para cualquier lado sin consecuencias. Juntos por el Cambio debe ser inteligente en el planteo de gobierno que va a hacer, teniendo en cuenta que va a recibir un país incendiado. Y para eso necesitamos que la coalición sea muy fuerte. Que todos estemos compenetrados en la causa que vamos a defender, porque será un proceso duro. No se puede salir de este lío sin decisiones drásticas. Lo que no podemos es mentirle a la gente. El país está al borde de una hiperinflación; no hay confianza en el mundo; no hay ingreso de divisas; Argentina está bloqueada: no puede importar porque no tiene dólares y no puede exportar porque las condiciones son pésimas. Va a doler, pero debemos dar garantías que luego vendrá un país mejor.

“Respeto las aspiraciones de todos los que quieren ser candidatos a intendente. Pero debemos estar unidos”

-¿Cómo se presenta la coalición en Córdoba frente al año que viene?
-Estamos más ordenados. Hay un acuerdo entre Luis (Juez) y Rodrigo (De Loredo) de que lo razonable es que el candidato a gobernador sea quien mejor esté posicionado. Es una cuestión lógica en toda coalición política. Los dos están trabajando provincialmente. Sabemos que somos competitivos. Somos conscientes que no hay que subestimar al peronismo. Hace 24 años que gobiernan. Y siempre han aplicado la misma receta que es tratar de dividir a la oposición para poder seguir en el poder. Lo sabemos y debemos no ser víctimas de eso. Juntos por el Cambio tiene una gran oportunidad de gobernar la provincia. Tiene dos candidatos muy competitivos que además juntos se potencian. Por el contario el PJ tiene un solo candidato que está comenzando a desnudar algunos problemas. A este gobierno provincial se le valora la obra pública, y claramente el gobernador Schiaretti ha sido un hacedor, nadie lo discute, pero hay deficiencias. No hubo una política de seguridad. Plantean que hay pocos policías porque modificaron la ley y ahora los agentes tienen tres años de cursado, pero no se puede no planificar ese tema. Si se gobierna una provincia no se puede no planificar que se va a quedar sin policías. Es preocupante. Lo vemos en Río Tercero: escaso equipamiento, poca gente en la calle. Vemos deficiencias en materia de salud. No quiero decir que los profesionales de salud no sean buenos; claramente no dan abasto. Falta personal. En educación Córdoba necesita un salto de calidad. Es un gobierno que le ha dado atención al cemento, pero se ha olvidado de aspectos centrales de la vida de la comunidad, fundamentalmente la seguridad. Nos preocupa a todos. Muchos vecinos se quejan de los robos: es grave que esto ocurra. 

Ferrer esta semana junto al ministro Busso y el legislador Scorza: la relación institucional con la Provincia y con el gobernador es excelente, dijo el intendente

¿Más cerca de la reelección en Río Tercero?

Futuro político
-¿Definió su rol político dentro del armado de Juntos por el Cambio en Córdoba?
-Voy a ocupar el rol que la coalición necesite que ocupe. Fui jefe de campaña de la última elección. Y al ser la elección más exitosa, con mayor diferencia en votos de la historia de la provincia, me coloca en un lugar de mucha responsabilidad. Luego nuestro espacio político definirá qué rol asigna a cada uno. Yo estoy dispuesto a ocupar el rol si me convence y creo que le sirve al espacio y a la ciudad de Río Tercero. Pero hoy no es momento de discutir candidaturas. Estoy muy cómodo en Río Tercero también. 

“No solo queremos recuperar el legislador departamental, sino volver a gobernar ciudades  hoy en manos del PJ”

-¿Está más cerca de liderar un proyecto de reelección en la Intendencia que de ocupar una responsabilidad provincial?
-No está nada definido aún. La posibilidad real de competir en Río Tercero depende más de mí que de cualquier otra cuestión. Lo provincial es diferente. No depende de mí sino de una serie de factores. Yo pertenezco a Juntos por el Cambio y no podría decirle que no a alguna opción si apareciera. Pero no depende de mí. Lo que sí depende de mí es realizar una buena gestión en la Municipalidad y tener todo preparado para competir por la reelección. El equipo quiere seguir. Está con muchas ganas. En el caso de no ser yo el candidato, presentar una opción competitiva para que el equipo siga gobernado la ciudad. 

-En el caso de encarar un proyecto de reelección, ¿observa al espacio unido detrás del mismo?
-Vamos a intentar que todos estemos unidos. Depende de la voluntad de todos los dirigentes del radicalismo de entender que queremos seguir gobernando y que tenemos que estar todos juntos. Respeto las aspiraciones de todos los que quieren ser candidatos a intendente.

“El candidato a legislador debe ser de Río Tercero. El 45 por ciento del padrón del departamento está acá”

Recuperar el departamento
-¿Es claro el objetivo de recuperar la banca del legislador departamental hoy en manos del justicialismo?
-Sí, no solo queremos recuperar el legislador departamental, sino volver a gobernar muchas ciudades que hoy están en manos del peronismo en Tercero Arriba. En ese objetivo nos hemos comprometido tanto Rubén Dagum (intendente de Almafuerte), como Gustavo Botasso de Hernando, Octavio Ibarra de Oliva y yo, en darle apoyo a todos nuestros dirigentes en los diferentes pueblos para recuperarlos. Creemos que se presenta un escenario relativamente favorable. En la elección provincial, gane quien gane, va a ser una elección pareja. Y un departamento como el nuestro que cuenta con Río Tercero, Almafuerte, Hernando y Oliva, que concentran el 80 por ciento de los habitantes del departamento, tiene grandes chances de recuperar el legislador. Vamos a trabajar para eso.

-¿Cuál cree que debe ser el rol de Río Tercero en ese armado?
-Creo que el candidato debe ser de Río Tercero. El 45 por ciento del padrón del departamento reside acá. Claramente un candidato local se vuelve altamente competitivo. Hay que acordarlo con las otras fuerzas y con el radicalismo, para poner el mejor hombre o mujer y ganar la elección. 

Una solución para “Lo Tengo”

Plan Lo Tengo
-Sobre la gestión puntualmente, ¿tiene novedades sobre el Plan Lo Tengo en Río Tercero? ¿Está el Municipio encaminado a resolver el problema con la entrega de los lotes?

-En su momento la Provincia giró los fondos para la infraestructura, pero por el paso del tiempo no alcanzaron para ejecutar las obras. Y lo que acordamos con la Provincia es una devolución de esos fondos en 120 meses con una actualización de coeficiente de variación salarial que rondaría los 51 millones de pesos. La Provincia nos retornaría todos los lotes. De esa devolución se harían cargo los privados que hoy tienen el loteo, con lo cual el Municipio no tendría que poner un peso, con el compromiso que el loteador ponga a disposición de los adjudicatarios el terreno correspondiente a un valor muy inferior al de mercado. Calculamos alrededor de un millón de pesos por cada lote, a pagar en 120 cuotas. Es un beneficio muy grande para las personas que habían sido adjudicadas. Una vez que se cumpla ese paso, el resto de los lotes quedan para el privado que los comercializará como disponga.

“Es preocupante la inseguridad. Lo vemos en Río Tercero: escaso equipamiento policial y pocos agentes”

-¿Habrá alguna exigencia para disponer plazos de construcción?
-Vamos a poner alguna condición a quienes eran adjudicatarios del plan Lo Tengo y ahora lo serán de estos lotes, en el sentido que no se podrá hacer una operación comercial. Es decir comprarlo a un millón de pesos, darse vuelta y vender el lote a dos millones o tres. No queremos que haya especulación: solo queremos que la familia que lo necesite acceda al lote y se haga su casa, accediendo a un crédito Procrear o el que sea. Los lotes están escriturados a favor del Municipio por lo tanto escriturar a favor de la gente es muy fácil. Ha sido una buena solución. Debo agradecer a la ministra Laura Jure con quien pudimos destrabar el tema, al gobernador, y a los privados que van a poner de su parte. 

-¿Está conforme con la marcha de la gestión, respecto de las obras? ¿Cree que hay que profundizar algún aspecto?
-Hay que seguir por ese camino. Es difícil debido a la situación económica del país proyectar a largo plazo. Ahora vamos a encarar un proyecto muy grande para la Plaza del Gaucho. Será un antes y un después es materia de espacio público. Conservando el verde pero dándole una vida totalmente diferente al lugar. Vamos a seguir con la pavimentación de calles. Tenemos como prioridad avanzar en barrio Cabero, que es un barrio donde no hemos hecho mucha obra pública. Le hemos dado mucha importancia a las obras más chicas pero que tienen un impacto visual y cambian la sensación en la gente. Tratamos de tener arreglada la ciudad, con los cordones cuneta pintados, las calles con cartería nueva, garitas modernas, embellecer todos los espacios públicos de la ciudad. En algunos hemos incorporado juegos, mesas y bancos. Está en marcha la obra del balneario. El gobernador Schiaretti me garantizó la segunda etapa, que es muy importante. Va a continuar la ciclovía y el adoquinado. Vamos a avanzar con muchas obras de cordón cuneta.

-¿Y la plaza San Martín?
-Está en proyecto para iniciarse en noviembre. Hay que actualizar los presupuestos.

-¿El playón deportivo se construirá en Monte Grande?
-Sí, es cubierto. Una infraestructura importante. Además viene con oficinas anexas. Le va a cambiar la cara y la fisonomía al barrio (es uno de los 100 playones deportivos de la Provincia). Se van a agregar juegos para niños. Paralelamente estamos avanzando con la iluminación de la calle Riobamba que ya está pavimentada. Va a quedar una avenida hermosa. 

-¿Cómo está la relación con el gobernador?
-Es excelente. Una relación institucional. Cuando nos visitó hace algunos días hablamos mucho de política sobre el escenario nacional. Y coincidimos mucho en esa mirada. La diferencia entre nosotros y el Gobierno nacional es la gestión. Y gastar menos de lo que entra.