La clínica Santa María de Almafuerte ingresará en una nueva etapa de crecimiento, de acuerdo a lo anunciado desde la nueva sociedad compuesta para conducirla.
"Queremos disipar temores de que cierre y se pierdan fuentes de trabajo", manifestó el médico Diego Camps.
Por el contrario, abrir una terapia intensiva, crear un servicio de hemodinamia e incrementar el número de especialidades médicas, representan los principales objetivos enumerados por el profesional.
También se plantea el desafío de asentarse en terrenos que no están explorados en la región como neuro-cirugías e intervenciones cardiovasculares, adelantó Camps.
"Hay cosas por las cuales tenemos que correr a Córdoba y con el tiempo las vamos a resolver en Almafuerte",
aseguró.
Naturalmente, estos planes de expansión vendrían acompañados por nuevas incorporaciones de personal.
"Venimos a responder a una necesidad planteada en la zona y ni hablar durante la temporada turística",
enfatiza el directivo médico.
Vale decir que el Hospital Salvador Scavuzzo, más allá de reconocidas mejoras durante la actual gestión municipal, responde a la atención primaria y entre otras cosas, no cuenta con internación.
En esta nueva gestión de la Clínica Santa María, acompañan a Camps, -quien viene de ser director de la Clínica
de la Familia en Río Tercero-, otros cinco profesionales de la salud. Ellos son: los médicos Guillermo Ferrero
(auditor), Claudio Turco (neurocirujano), Guillermo Funes (pediatra) y César Rodríguez (clínico).
"En sus casi 30 años, la clínica atravesó diferentes etapas pero ahora pretendemos darle un enfoque innovador",
concluyó Camps.