Ni bien concluido el receso invernal, al menos para quienes viven en la provincia, desde la subsecretaría de Turismo de Almafuerte, se brindó un resumen de lo ocurrido en este destino, durante tal período.

Algunas cifras o datos pueden parecer modestos si se los compara con centros turísticos tradicionales, sin embargo, en el ámbito local se muestran conformes en sintonía con expectativas mas moderadas.

“Todavía no somos un destino de invierno”, reconoce Soledad Carrera, a cargo de la mencionada dependencia municipal, aunque al mismo tiempo habló de “balance positivo” en base al interesante movimiento generado por los llamados “excursionistas”, es decir, aquellos que fueron a pasar el día.

En este contexto, la funcionaria destacó especialmente la aceptación que tuvieron las propuestas de cicloturismo y trekking, atrayendo a más de 50 visitantes. Eso permitió identificar alternativas a los conocidos atributos naturales y sirvió como una buena muestra de trabajo mancomunado entre el sector público y nuevos prestadores privados de la ciudad. La creación de más circuitos para desarrollar estas actividades, es algo en lo que ya se está trabajando, aseguran.

El predominio del excursionismo, que en el informe municipal es atribuido principalmente a la “realidad económica” hizo que la ocupación promedio quedara en un 50 por ciento con dos noches de pernocte entre la mayoría de los huéspedes.

De todo lo descripto anteriormente, se desprende que predominó un turismo de cercanía y tanto Córdoba como Río Tercero, siguen siendo las principales procedencias de los visitantes.

De acuerdo a lo manifestado por Carrera, este movimiento pudo observarse principalmente en los paradores que durante varias jornadas “estuvieron repletos”. Vale decir que la gastronomía es una de las principales apuestas de Almafuerte para romper la estacionalidad y ser atractiva más allá del verano.

Durante estas vacaciones, también se ofrecieron actividades para los más chicos con el Museo Camiare como epicentro, pensadas principalmente para las familias locales que no tenían la posibilidad de vacacionar en otros destinos. Allí se realizaron talleres de pinturas rupestres, modelado de vasijas y estatuillas, como así también, teatro de marionetas y cine, que en su mayoría convocaron alrededor de 20 niños.

Proyección
Sin demasiado margen para  relajarse, desde el área de Turismo señalaron que ya se comienza a proyectar otra gran temporada de verano, aunque en el trayecto, habrá una interesante agenda de eventos y desde septiembre, ya estarán funcionando nuevamente, todos los paradores.

Para la temporada estival se aguarda entre otras atracciones, que se encuentre operativa la segunda etapa de Playa Chic, el emprendimiento más ambicioso localizado al este del complejo Piedras Moras, con la inauguración de nuevos locales. También se plantea ampliar las áreas de estacionamiento y agregar cuerpos de baños, entre otros proyectos para mejorar los servicios disponibles junto al lago.