El intendente Rubén Dagum insiste en remarcar que recibió una Municipalidad endeudada en más de 30 millones de pesos, y con un bajo índice de recaudación tributaria. Fue el primer diagnóstico enunciado a los pocos días de asumir y lo reiteró esta semana en un breve video de fin de año.
Y la réplica del exjefe comunal y legislador departamental Adrián Scorza no se hizo esperar demasiado. Fue contundente esta semana al señalar que el nivel de endeudamiento que generó su gestión no debería complicar en lo más mínimo el comienzo de gestión del odontólogo radical, tras destacar que cada peso fue invertido en mejorar los servicios al vecino. 
"Tenemos a disposición los informes de gestión, en los cuales detallamos cómo estaba organizada la gestión por áreas y sus presupuestos. Eso indica que somos colaborativos", manifestó Scorza esta semana en una entrevista concedida a la FM Almafuerte. "En la transición hemos brindado toda la información que teníamos y nos hemos puesto a disposición para cualquier duda o consulta", añadió. Al mismo tiempo, Scorza recordó cómo recibió la Municipalidad en su primer período de gobierno. "Sin maquinaria alguna. El único camión era modelo 85. Había un Peugeot que se utilizaba para seguridad urbana que tenía arena en el tanque (de nafta). Las motoniveladoras eran de las décadas del 50 y 60 y estaban desarmadas. La situación era muy complicada y desde esa nada misma, nosotros comenzamos a organizar un estado que trabajara en equipo, creamos un área de Relaciones Humanas para que se dejara de hacer política con el empleado público y siempre exigimos compromiso y trabajo para con el vecino de Almafuerte". 
Respecto de la deuda achacada por la nueva gestión radical, Scorza -contador público de profesión- señaló que no es correcto establecer un número de deuda sin contrarrestarlo con otro dato. "Una deuda es un pasivo que se debe contraponer con un activo, que arroja un patrimonio neto. En ese balance se puede ver cómo se ha capitalizado la Municipalidad. Si uno coloca la deuda, pero no menciona (las inversiones) en el Hospital, en el museo, las maquinarias, los loteos para viviendas, más de 300 obras públicas, no se mencionan las luminarias, (ni las mejoras en) el lago, el balneario... para un comerciante que hoy está luchando para sobrevivir, 30 millones de pesos y le parece una barbaridad", explicó. 
Scorza admitió que le molestó la utilización política de la deuda y subrayó que ese pasivo está compuesto por aportes a largo plazo de la Provincia, "que es una ayuda para los municipios y de coparticipación". Manifestó además que hay cuotas fijas en pesos para la compra de maquinarias y admitió deudas con proveedores con cheques de pago diferido por 16 millones de pesos, a cancelar en el corto plazo.
Pero enfatizó que no es significativa para un presupuesto anual (de 2019) de 240 millones de pesos, y de 1600 millones de pesos acumulados en los ocho años de gestión. "La deuda ha sido para capitalización (del Municipio) y hubo un cuello de botella, como siempre se produce, para el pago de aguinaldos y sueldos de diciembre". 
"Yo entiendo que se está aprendiendo y que hay un equipo nuevo que llegó con otra escala. Almafuerte no es una ciudad pequeña y fácil de administrar. El Estado creció en beneficio de la ciudad", profundizó Scorza. 
Al mencionar las funciones de la planta de personal, Scorza dijo que "cada empleado tenía su puesto asignado. No había nadie que no trabajara. Y nosotros lo hicimos sustentable". 
   Entre otras cuestiones, Scorza remarcó las inversiones en la prestación de salud y las metas para posicionar a Almafuerte como una ciudad turística aprovechando el lago Piedras Moras  y el predio del balneario.