Por tercer año consecutivo el consumo general de energía eléctrica de Río Tercero fue menor al registrado en 2011. Es decir el más bajo de toda la década. El dato puede interpretarse de dos maneras: la virtud que tuvieron los vecinos para ahorrar electricidad y realizar un uso racional del recurso, o bien el escaso crecimiento de la ciudad. 
   

Los datos surgen del último balance de la Cooperativa de Obras y Servicios Públicos, que lo refleja de forma destacada en su Memoria anual. “En este ejercicio el consumo de energía eléctrica ha tenido un mínimo crecimiento respecto del año anterior, pero respecto de períodos anteriores, como 2016/2017, el decrecimiento fue del 9%”, expusieron en el documento. 
   

Observando la tabla de kilovatios vendidos a los asociados, las cifras marcan un estancamiento de los últimos tres años, y una involución respecto del año 2011. 

En 2018 la cooperativa vendió 83,7 millones de kilovatios, en 2019 el número cayó a 80,7 millones de kw, mientras que en 2020 la venta fue de 80,2 kw. En 2021 se elevó levemente a 80,4 millones de kilovatios.
   

La década comenzó con 81,3 millones de kilovatios vendidos en 2011, con un crecimiento importante en los años sucesivos, hasta llegar a los 90,5 millones de kilovatios consumidos por Río Tercero en 2017, el mejor año de la década. 
   

¿Qué demuestran esos datos? Que “vendimos menos que en 2011, por lo cual estamos una década atrasados”, puntualizaron desde la Cooperativa. En el análisis, surge que todos los usuarios realizaron un menor gasto de energía eléctrica, con uniformidad en todas las categorías. 
   

Así, la Cooperativa explica en su Memoria anual, que en el ejercicio los consumos de energía crecieron solo 0,46% respecto del anterior. Los datos demostraron que la venta, medida en kilovatios, fue similar a la de 2010, “en función de la recesión existente en el país y en nuestra ciudad”. 
   

En tanto, no hubo cambios en la cantidad consumida por categoría. casi el 55% corresponde a la Residencial o casas de familia, mientras que el comercio aumentó su participación en el consumo, del 13,6 del año pasado, a 14,7% en este período.

En la continuación del análisis de consumos, la Cooperativa destaca que “la industria aumentó su participación (levemente)”. El porcentaje pasó de 1,5% del año pasado, a 1,7% en este período. Prácticamente estable, lo que evidencia que no hubo un crecimiento marcado en este rubro productivo.

"No hubo cambios en la cantidad consumida por categoría. casi el 55% corresponde a la Residencial o casas de familia, mientras que el comercio aumentó su participación en el consumo, del 13,6 del año pasado, a 14,7% en este período".
   

Además, los grandes consumidores disminuyeron su participación en el consumo total de energía, del 20% de 2020, a 19% en 2021.
   

Asimismo, disminuyeron su participación los usuarios gubernamentales, entre ellos el alumbrado público y el consumo de edificios oficiales, probablemente como consecuencia de la nula actividad por la cuarentena.

Tarifas
En materia tarifaria, la Cooperativa resalta que el incremento aprobado oficialmente en el año, resultó muy por debajo de la inflación. Mientras el Índice de Precios al Consumidor para el Servicio de Energía Eléctrica fue del 50,4%, el aumento aprobado por el gobierno en el ejercicio fue del 11,5%, impactando en la factura un 22%, y con un incremento para la Cooperativa del 28%.
   

“Resulta que el aumento ha sido menor a la mitad de lo que significó la inflación del último ejercicio”, subrayaron en la entidad prestataria.
   

En tanto, la Cooperativa le destaca un capítulo aparte al atraso tarifario en la sección de agua y cloacas. Indica que el servicio ha debido recibir el aporte de los excedentes de otras prestaciones de la Cooperativa para su funcionamiento. La pérdida fue de unos 47 millones de pesos en el ejercicio anual.
   

Para la Cooperativa la “situación se está analizando en el proyecto para un nuevo contrato de concesión, que no se firmó en este ejercicio y que debería firmarse en el transcurso del próximo”. La concesión se encuentra vencida desde hace cuatro años y prorrogada.
   

“Nos queda como meta para el próximo ejercicio, la firma del contrato, que hace varios años venimos luchando para lograr un acuerdo tarifario para el servicio”, indicó el presidente del consejo de administración Luciano Badino.
   

En la Cooperativa admiten la complejidad del asunto, puesto que la discusión pasa no solo por el nuevo esquema tarifario y su actualización, sino por las inversiones en obras para mantener el servicio. A esto se le suma que gran parte de la infraestructura de prestación es propiedad de la Cooperativa, más allá de que el servicio en sí es municipal.