Un homenaje jazzero a María Elena Walsh

La obra musical de María Elena Walsh (1930-2011) es tan inagotable que todavía quedan varias aristas pendientes para su abordaje. Una de ellas era la interpretación en clave jazzera de sus canciones, lo que finalmente concretó Jivers en su cuarto trabajo discográfico. Se trata de un cuarteto vocal de Buenos Aires que se dedica a un género específico dentro del jazz: el swing vocal de los años 30 y 40. 

El material se titula Swingin’ María Elena, e integra temas emblemáticos de la autora, adaptados y arreglados para la identidad estética de la agrupación. El disco se presentará oficialmente el domingo 5 de noviembre a las 18 en el Espacio Xirgu Untref (Chacabuco 875, San Telmo. CABA). Las entradas anticipadas ya se encuentran disponibles a través del sitio Passline. En contacto exclusivo con TRIBUNA, Juan Cristóbal Barcesat -cantante y arreglador del grupo- habló de este homenaje a María Elena Walsh.
 
Swingeando a María Elena                 
En palabras de los Jivers: “Hace años veníamos con ganas de hacer un homenaje a María Elena Walsh, esa magnífica autora que pegó tan fuerte en nuestra memoria emotivo-musical desde tan chicos, en una época donde no había mucha oferta dentro de la música infantil. Hacer esta ‘relectura jazzera’ de sus clásicos fue realmente emocionante para nosotros, poniendo en relieve ese swing que ya tenían las canciones de su primera época y sumergiéndonos en ese mundo fantástico y delirante. Pudimos además contar con la participación de grandes músicos, entre ellos el guitarrista Ricardo Lew, que fue sesionista de María Elena en su juventud”. La realización de este disco fue posible gracias al apoyo del programa Mecenazgo Cultural de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. En la presentación del 5 de noviembre, además de recorrer su repertorio, estarán acompañados de una pareja de bailarines que amenizará las canciones con coreografías de lindy hop (danza estadounidense de los años 20) y charleston.

Gente con swing
Jivers es un cuarteto integrado por “Checha” Naab (voz y redoblante), Juan Cristóbal Barcesat (voz, tabla de lavar, piano, acordeón y cajón peruano), Juan Martín Yansen (voz, guitarras y banjo) y Daniel Schneck (tuba y voz). En la grabación de Swingin’ María Elena, la banda contó con los siguientes invitados: Juan Klappenbach (clarinete), Germán Weigert (batería) y Ricardo Lew en guitarra. En cuanto a Lew (75), es un prócer argentino de las seis cuerdas, quien tocó con casi todo el mundo desde Sandro a Piazzolla. También acompañó, siendo muy joven, a María Elena Walsh en la década del 70: “Llegamos a él a través de Juan Klappenbach, el excelente clarinetista que participó en el disco. Queríamos contactar a los músicos que hubieran acompañado a María Elena, con el problema de que hay muchos que ya no están. Con Ricardo encontramos a un amor de persona, que nos contó un millón de anécdotas y no dudó en sumarse a este proyecto. Hasta nos preguntó qué guitarra queríamos que usara en el tema. Nosotros le propusimos ‘Canción del jardinero’, donde participó con un solo hermoso.  No está confirmado, pero esperamos que puede estar en la presentación del álbum en el teatro Xirgu”, señaló Cristóbal Barcesat.

Reelectura jazzera
María Elena Walsh abarcó distintos géneros musicales en su carrera y es recordada por el rescate que hizo -junto a Leda Valladares- del folclore argentino, especialmente de canciones anónimas del noroeste argentino. Aunque también se nutrió de otros folclores, como el español, el inglés y el norteamericano. Varias de sus composiciones más emblemáticas, como “El reino del revés”, pertenecen a ritmos tradicionales de Estados Unidos (jazz, twist, bluegrass, folk, etc.) y con instrumentación típica (contrabajo, batería y banjo o guitarra). Esto se debe a la influencia del music hall y del cabaret parisino en sus primeros espectáculos infantiles, que tenían estructura de varieté. Jivers propone hacer hincapié en ese vínculo -no tan evidente- entre distintas canciones de su repertorio: “Nos impulsó a hacer este disco que no hubiera, en general, reversiones ni homenajes del mundo del jazz a la obra de María Elena. Tampoco se habla mucho de las influencias que poseía de este género. Cuando estuvo en Francia se nutrió mucho del varieté parisino, que poseía jazz y comedia musical. Por supuesto, está lo de Escalandrum y Elena Roger, pero desde otro enfoque”, expresó Barcesat.

Sultanes del swing
El grupo comenzó su carrera en el año 2012, presentándose en muchos escenarios prestigiosos del circuito de Jazz de Buenos Aires. También han participado de diversos festivales, eventos sociales y culturales tanto en Argentina como en Europa. Incluso el video del tema ItDon't Mean A Thing (IfItAin'tGotThat Swing), se filmó en la parte sur de Alemania. Hasta el momento, llevan cuatro discos editados en estudio: Jivers (2013), Hot Ginger & dynamite (2015), Swingin’ harmony (2020) y el más reciente Swingin’ María Elena (2023). En Córdoba todavía no han tocado y es uno de los objetivos a corto plazo de este cuarteto vocal-instrumental. 

En cuanto al repertorio del flamante material, los nueve temas son: “El twist del mono Liso”, “El reino del revés”, “Canción del jardinero”, “El show del perro salchicha”, “Canción de tomar el té”, “La calle del gato que pesca”, “Canción para bañar la luna”, “Canción de la vacuna” y “La reina Batata”. Los arreglos y producción de Swingin’ María Elena  fueron de Juan Cristóbal Barcesat y la técnica de grabación fue Carla Gatica. En sus inicios, Jivers abrevaba en la parte más purista del género. Luego fueron incorporando temas de otros estilos -“Bella Ciao” o “Billie Jean” de Michael Jackson- adaptándolos a su propuesta. Ahora pusieron a cantar y bailar jazz tradicional a los queridos personajes de María Elena Walsh, una figura clave de la cultura argentina.