“El Municipio no solo es servicios, sino que debe ser un puente hacia el desarrollo”

Es una solución para mucha gente, para el vecino, entonces hay que ir por ese camino”, enfatiza José María “Pecho” López, acerca de uno de sus ejes de campaña: el desarrollo económico, la producción y el trabajo. 

El candidato a intendente de Unidos por Río Tercero transita la última semana de campaña rumbo a las elecciones generales del domingo 27 de agosto. 

A diferencia del proselitismo desplegado en las PASO de junio, Unidos se muestra con más acción y trabajo para divulgar las propuestas que se desplegarán en un eventual gobierno liderado por el director de la Fábrica Militar y dueño de la fábrica de tractores Pauny. No será una tarea sencilla: la lista debe remontar al menos 29 puntos que los separa de la primera, de acuerdo a los resultados de aquella contienda. Unidos logró el tercer lugar con 15,6%, y Juntos por el Cambio ganó con el 44,5%.

López recibió a TRIBUNA en su casa de Río Tercero y destacó que el Municipio “no solo debe ser una entidad de servicios hacia el vecino, sino que se debe tomar como puente hacia el desarrollo”.
   En ese sentido, recordó una de las frases del fallecido exgobernador De la Sota: “A quien venga con una propuesta de inversión de otro lugar, se la mejoramos”.

-¿Cómo imagina ese rol municipal?
   -Con ordenanzas claras y precisas, que le den posibilidades y seguridad jurídica al inversor, que es lo primero que pide. En segundo lugar con un parque industrial moderno y acorde al 2023. Y tercero articulando con el gobernador (Martín) Llaryora y empresas autopartistas que sé tienen interés en instalarse y hay que cuidarlas.

Estabilidad 
-¿Qué significa cuidarlas?
   -Darle seguridad jurídica, todos los servicios que necesitan y que la burocracia estatal no perjudique las posibilidades del privado. Simplificarle todo. Una de las exenciones impositivas por estar en un parque industrial, es no pagar el Impuesto a los Ingresos Brutos por diez años. Si hay un impuesto perverso y distorsivo, es ese. El parque debe tener de todo, servicios, una sala de primeros auxilios como los de San Francisco y Villa María, que tienen un banco adentro y hasta una guardería; una línea de colectivos y servicio de ambulancia: que el empresario sienta protegida a su gente.

-¿Qué aspectos sociales son los beneficiados?
   -Si uno posibilita el acceso a un trabajo digno, se solucionan los problemas sociales. Río Tercero debe brillar y ser el polo de atracción. Debemos hacer un centro comercial (geográfico) que nos invite a recorrerlo, para consumir en los negocios. Y lo disfrutemos. En lugar de tener la terminal de ómnibus allí que sea un parque como el Güemes de la ciudad de Córdoba. 

-¿Qué otras obras públicas proyecta?
   -Si me toca gobernar lo haré de afuera hacia adentro. Voy a trabajar en los barrios. No puede ser que todavía haya barrios con calles de tierra e intransitables. Con falta de luminarias y de servicios. Y falta de transporte adecuado. No puede ser que hay barrios donde el ómnibus no entra. Debemos instalar una oficina municipal en cada barrio, para descentralizar la Municipalidad. El vecino podrá hacer todos los trámites en el lugar. Es decir crear un concepto de reconocimiento y puesta en valor de la periferia o los barrios más alejados del centro. Debemos darle lugar a los microemprendedores con la ayuda de un Banco municipal. Siempre con el Estado presente. Habrá obras que se podrán hacer con el presupuesto municipal, y otras con la ayuda de la Provincia y la Nación. Todo debe ser transparente y cristalino. Lo que pasó en barrio Castagnino con la colocación de adoquines, no fue claro. Se hizo con fondos nacionales y con una empresa sin capital operativo. La obra no se hizo bien. No veo transparencia en la gestión municipal. No sabemos por qué, un mes antes de las PASO, se duplicaron un montón de presupuestos. 

-¿Cómo evalúa la gestión municipal?
   -Pienso de otra manera que (el intendente) Ferrer. Ellos son políticos y yo no. Para mí dos más dos son cuatro, y por ahí para la política dos más dos son tres y medio. Hacen cosas pensando en los votos. Y yo voy a hacer cosas para que la gente esté mejor. Si no se hace una buena gestión, se ponen a trabajar dos meses antes de la elección. Hay que trabajar durante los cuatro años. A la administración la veo desde otro lugar, porque vengo de la actividad privada, más pragmática. La virtualidad está integrada en todos lados, y acá seguimos con el cuadernito. Hay que hacer un acuerdo para bajar los impuestos y los tributos, que es lo que pide la clase media. Con beneficios si se pagan online. La gente va a responder. Fueron muchos años de una forma de gobierno, le pido al vecino que me dé la chance de probar con otra.

-¿Impulsará un plan de viviendas?
   -Sí, un plan de viviendas social. En Las Varillas (sede de la empresa Pauny) hicimos un plan de viviendas (para los empleados). Empezamos con unas 15 casas y cobramos una cuota menor al alquiler. Y llevamos a esta altura más de 400 casas, de dos dormitorios, baño, living comedor y cochera. Todos tienen su vivienda.  

-¿Cómo planteó la campaña?
  -Visitando los barrios y preguntando al vecino qué le haría al barrio para mejorarlo. Estamos realizando un trabajo profesional con el acompañamiento de mucha gente.

-¿Se siente acompañado por el equipo y el gobernador electo?
   -Absolutamente. Con Llaryora tengo comunicación todos los días. Estoy aprendiendo mucho de él. Hizo una excelente gestión en San Francisco y ni hablar de la ciudad de Córdoba. No sirve comprar votos, sino hacer una buena gestión. Llaryora me dijo que quiere llevar a Río Tercero al lugar donde siempre estuvo y apuntó que soy la persona ideal. Vamos a intentarlo.

Apoyo
-Anunció que Llaryora construiría una residencia universitaria en Córdoba para los jóvenes de Río Tercero.
   -Sí, para los chicos que no pueden pagar un alojamiento o viajan todos los días. Darles un albergue para que puedan seguir estudiando es muy importante. Una ciudad sin educación no tiene futuro. 

-¿Siente el apoyo de la familia?
   -Sí, costó (risas) pero se logró. Recién acabo de hablar con “Pechito” a Europa (piloto de carreras de elite), y le dije que si construimos el kartódromo tiene que ser el primero en dar una vuelta. “Contá conmigo”, me dijo. Hoy el automovilismo está volviendo a sus fuentes con el karting. Se juntan 150 kartings por carrera. Imagínese ese movimiento en Río Tercero con gente consumiendo y alojándose acá. Ahí está parte del desarrollo económico. Hoy la Capital Nacional del Deportista es un eslogan. Como decimos con Martín, hay que hacer una especie de villa olímpica. No se sabe cómo Río Tercero ha generado tantos deportistas de elite, sin infraestructura. 

-¿Cómo encararía el problema de la inseguridad?
  -Atacando el flagelo de la droga. En gran parte la inseguridad viene por ese problema. Estamos viviendo ya en una ciudad insegura. Nadie dice nada pero acá hay entre 20 y 30 robos por día. Es culpa también de la justicia. 

-¿Le preocupa el contexto político del país luego del resultado de las PASO nacionales?
   -Sí, el voto a Milei fue un voto castigo. El pueblo le dijo a la clase política que no está haciendo bien las cosas. En Córdoba estuvo 40 minutos y sacó 680 mil votos.

-En Río Tercero no estuvo nunca y logró 10.500 votos.
   -Sin nada.

-¿Qué le pide al vecino en estas elecciones?
   -Le pido a la gente de Río Tercero que me apoye y nos dé la oportunidad. Somos una alternativa al gobierno actual, que tuvo ya muchos años y hay cosas que no pudo o no quiso hacer, para transformar la ciudad. Tenemos un equipo de trabajo muy profesional, que no está por un cargo en la Municipalidad sino para hacer el bien a la ciudad. No pensamos en lo que pasa a nivel nacional, sino en Río Tercero. Tenemos un gran apoyo del gobernador electo, que es lo que me anima. En la democracia, la alternancia es muy buena. 

La familia, clave en su decisión 

Pecho López admite que la decisión de asumir el desafío de una nueva candidatura a intendente, no fue sencilla. Las conversaciones con su familia y sobre todo con su esposa Mabel, fueron claves. “Hacer algo por la ciudad es una materia pendiente que tiene. Lo charlamos juntos, como todo lo que hacemos y encaramos. Él quiere realizar su aporte a la ciudad, de lo que sabe y aprendió. Devolverle a la ciudad lo que nos dio”, destaca Mabel ante la consulta de este medio. Y asegura: “En lo que pueda ayudarlo, lo haré. Estando a su lado, hay muchas cosas que me gustaría hacer por la gente, por las mujeres y por los niños, que son mi debilidad. Son los más indefensos y los que menos posibilidades tienen”. Mabel aclara que en un eventual gobierno de su marido, no tendrá ningún cargo. No lo quiere ni lo buscará. Sólo enfocaría su vocación en tareas sociales. Dice que se interesa por la política y que le gusta intercambiar opiniones con su compañero de vida. “No siempre estamos de acuerdo”, reconoce.