Para la segunda etapa, Ferrer planteó vincular la economía del conocimiento con el trabajo

No modificará Juntos por el Cambio el contenido y mensaje de campaña para las elecciones generales del 27 de agosto. Todo lo contrario. El sector que encabeza el intendente Marcos Ferrer, que llega a la contienda con un gran respaldo electoral de las PASO, seguirá mostrando gestión de gobierno y proponiendo un nuevo esquema de ciudad para los próximos cuatro años. En diálogo exclusivo con TRIBUNA, Ferrer desarrolló algunos de estos aspectos.

-¿Cuáles son tus expectativas y las de tu equipo para las elecciones del 27 de agosto?
   -En las PASO nos fue muy bien (la lista de Juntos por el Cambio obtuvo el 44,5% de los votos). Tenemos un diferencia a favor que es la gestión, que está hoy muy valorada. Ese factor nos ubica en un lugar muy competitivo. Es importante que vaya más gente a votar, para que realmente se exprese bien la población sobre quién cree que debe conducir la ciudad. Estamos tranquilos con lo que hemos hecho y convencidos sobre lo que queremos hacer. 

-¿Creés que vas a repetir la performance de las PASO o superarla?
   -La expectativa es superarla, convenciendo a más gente, o que no nos votó o aquellos vecinos que no fueron a votar. Claramente es un resultado muy bueno; sacamos cuarenta y cinco puntos y medio con ocho candidatos a intendente. Es cierto también que cuando se da un resultado así es difícil superarlo. 

-¿Cuál es la etapa política y de gestión que viene? ¿Qué ofrece JxC luego de una primera gestión con impronta en obras públicas, en salud, en educación?
   -Viene una profundización de esos aspectos. En educación, con una mayor profundidad, vinculada a la economía del conocimiento, que es buscar la manera para que los jóvenes de Río Tercero no solo se capaciten, sino enlazarlo con un empleo. Vincularlos al mundo del trabajo. En los programas de educación tenemos distintos tramos, que todos tienen que ver con educar a las personas: niños, niñas, adolescentes y a los adultos mayores. Ahora hay que vincular a ese sector que se capacita con el mundo del trabajo. Para eso pensamos un proyecto que es, esencialmente, una fábrica de talentos: trabajar en la economía del conocimiento con nuevas tecnologías. Brindarles a todos los jóvenes de la ciudad, la posibilidad de acceder a conectividad y herramientas tecnológicas que quizá no puedan acceder por sus propios medios, para que se capaciten y se inserten en el mercado. Sobre todo de los nuevos empleos que están apareciendo hoy. Lo que antes era un curso de oficio, hoy debe estar orientado a tecnología vinculada a la informática, a la programación. Incluso con la producción propia. Hay muchos chicos que son talentosos pero no tienen el espacio, el lugar o la manera de resolver cómo avanzar en determinados campos.

-Sería un salto cualitativo, no ya sobre lo que viene, sino sobre lo que ya está.
   -Necesitamos que una capa de jóvenes se inserten en el mercado laboral y además se queden en Río Tercero. 

-A la luz de los resultados de las últimas elecciones provinciales y de la ciudad de Córdoba, ¿qué importancia tendría un triunfo de Juntos por el Cambio en Río Tercero?
   -Quedaría como un faro entre tanta ola celeste, por decirlo de alguna manera. Pero creo que las elecciones locales tienen mucho que ver con lo que pasa en cada localidad. No tienen que ver con fenómenos nacionales o provinciales. En nuestro caso está relacionada con la gestión que hemos hecho. Y no va a responder a la lógica de la cuestión provincial. ¿Qué vendrá a partir de ahí? Claramente una responsabilidad importante en Juntos por el Cambio y el radicalismo, para empezar a construir proyectos políticos nuevos, pensando en 2027. Pero es un camino largo.

-En ese contexto se habla en JxC de la importancia política de la elección de Río Tercero.
   -Río Tercero es una ciudad importante. Es el único bastión que le queda a JxC y simbólicamente pasa a ser una elección importante. Pero claramente no está determinada por lo provincial, sino localmente. 

-La elección provincial fue por una diferencia de tres puntos y lograron una paridad en la Legislatura, el control del Tribunal de Cuentas provincial y el triunfo en numerosos departamentos.
   -Hubo mucha paridad no solo en la cantidad de votos sino en toda la provincia, en los departamentos. En Tercero Arriba volvimos a ganar después de 24 años de triunfos ininterrumpidos del peronismo. Eso es una fortaleza. Habrá una provincia equilibrada con mucho más diálogo político. Juntos por el Cambio no está para obstaculizar nada, sino para que se modifiquen algunas cosas. Por ejemplo definir los plazos de los procesos electorales y no tener que estar pendientes de cuándo se decide convocar a una elección. Tratar de darle prolijidad y certezas a nuestros jubilados, de ver cómo se resuelve la cuestión de los docentes y fundamentalmente una nueva política en seguridad. (Martín) Llaryora tiene un gran desafío para resolver. 

-¿Cómo imaginás la relación institucional, de gestión y política con Llaryora?
   -Creo que me voy a llevar tan bien con Llaryora como me llevé con Schiaretti. Prácticamente todos nuestros gobiernos han sido con el peronismo en la Provincia, y siempre hemos tenido buena relación. La hubo con De la Sota y con Schiaretti, y no tengo dudas que la habrá con Martín. Él tiene muy claro el rol del intendente; lo ha sido de dos ciudades: San Francisco y Córdoba. Eso le da cercanía a los problemas. Tiene una enorme tarea que es construir un gobierno federal. Hace un planteo de federalismo a la Nación y tiene que tener esa misma impronta hacia el interior de Córdoba. Confío que será así. Lo conozco y tengo relación con él. 

-¿Pensás una segunda gestión con impronta en la obra pública?
   -Siempre falta mucho por hacer. Hay calles por pavimentar. Queremos terminar con la iluminación led…

-¿Cuáles, de todas las obras previstas, serán la más importante?
   -La pavimentación de calles es la obra principal a la que tenemos que apuntar y seguir recuperando espacios públicos en los barrios. 

-¿Cómo esperás que se presente y desarrolle el 2024?
   -Creo que será un año en el que puede haber recesión económica. Obviamente eso va a desacelerar un montón de cosas. Pero nuestra idea es seguir ordenados y continuar avanzando con obras. 

-No esperás dificultades políticas en función de cómo se ha planteado la elección que, de ratificarse, no habrá problemas de gobernabilidad.
   -Vamos a tener la posibilidad de darle practicidad a la gestión, más allá que seguiremos dialogando con la oposición. Se ha reconfigurado el tablero político en Río Tercero con actores nuevos. Eso va a implicar nuevos diálogos y relaciones.

-¿Se reconfigurará la oposición con la llegada de nuevos actores y el retiro de otros?
   -Es lo que se ha visto en las PASO. La aparición de Nico Rodríguez como emergente en la política produce un cambio generacional en la oposición. Y si el resultado se mantiene, claramente habrá una reconfiguración generacional de la política de Río Tercero. Que habrá que ver si continua en el tiempo o no, ya que dependerá de los resultados que obtenga esa generación. El radicalismo y Juntos por el Cambio se reseteó generacionalmente en el gobierno. La oposición no tenía emergentes generacionales: ahora tiene uno y aparece Angel Arri también (candidato libertario). “Pecho” López y la lista de María Luisa (Luconi) tienen nuevas generaciones en sus listas. Vamos hacia caras nuevas. Creo que Nicolás (Rodríguez) en su rol en el Concejo Deliberante tiene su propia impronta que se la impondrá a los temas. Cambia el diálogo político y habrá que ver si es fructífero y establecer hacia adelante políticas públicas. La única certeza que habrá (en un eventual segundo período) es que yo me voy a ir. Podré así hablar desde otro lugar con todos y tratar de consolidar dos o tres ideas fuerza que la ciudad necesita, esté quien esté en el gobierno. Si logramos eso, podremos sacarle ventajas a muchas ciudades. 

-¿Será más permeable ese diálogo con la oposición?
   -Sí, porque nunca resultó ser opositor por opositor mismo. Está claro que vamos hacia un fin de ciclo. Si yo gano la elección va a ser mi último mandato, por lo tanto al no competir se facilita más el diálogo. Siempre fue así al menos en mi experiencia. Nos va a permitir desarrollar políticas públicas a gran escala que estén avaladas por la oposición. Es decir, darle la impronta que le venimos dando a la ciudad priorizando algunos aspectos muy puntuales que tienen que ver con el futuro: seguir peleando por la universidad. Estoy trabando en un proyecto para un juzgado federal. Y estamos gestionando un destacamento de la Policía Federal a Río Tercero. Trabajamos en varios frentes que tienen que ver con potenciar la ciudad. Creo que va a ganar Juntos por el Cambio en el país y eso será para nosotros un punto muy a nuestro favor. Será la primera vez que coincidiremos políticamente con un gobierno nacional. Nos permitirá tener un anclaje y una bajada directa con el futuro Presidente.   

-¿Gane quién gane las PASO, sea Rodríguez Larreta o Patricia Bullrich?
   -Sí, pertenecemos al espacio. Tengo más afinidad con Horacio porque le valoro su impronta de gestión, que es parecida a la nuestra: es una persona ordenada, planifica y resuelve los problemas. Eso le hace falta a la Argentina: alguien que se ocupe de los temas y los resuelva. También tenemos excelente relación con Patricia y su gente. Con ambos vamos a tener puntos de llegada. El 14 de agosto (día posterior a las PASO nacionales) vamos a estar todos juntos trabajando para el ganador. Nos vamos a necesitar todos. No nos va a sobrar nada. Tendremos que hacer el mayor esfuerzo. 

-¿Qué mensaje le dejás al vecino?
   -Qué por favor vaya a votar. Que comprenda la importancia de expresarse. No importa por quién lo haga: solo que le de valor al voto. Es muy importante expresarse los días de las elecciones, porque es el único momento que la expresión cobra valor real, porque se puede modificar algo. Nosotros somos la garantía que las cosas que se vienen haciendo se van a seguir haciendo, además de profundizar mucho más.