La violencia no es buena en ninguna de sus formas y de ningún modo será la manera de impartir disciplina, orden, límites. Los padres de hoy lo saben. Y en el país, la ley se los prohíbe. Sin embargo, a diario se hacen públicos casos de maltrato infantil que referencian situaciones graves. Como la ocurrida en Río Tercero y que esta semana terminó con los responsables en la cárcel.

La jueza Guarania Barbero condenó a una pareja a cinco años y seis meses de prisión por encontrarlos culpables de causar lesiones graves en una menor de edad.

El hombre es el padre biológico de la niña y la mujer su pareja. Los abusos en contra de la menor, que actualmente tiene cinco años, comenzaron cuando tenía tres, según la investigación que llevó adelante la fiscal Paula Bruera, a partir de una denuncia realizada por un familiar de la pequeña.

La pareja había sido detenida en febrero de este año, en una vivienda de barrio Cerino. Tras la denuncia, la menor fue retirada del hogar y debió ser internada. Presentaba golpes en distintas partes del cuerpo, quemaduras y tenía bajo peso. Cuando fue dada de alta la Justicia ordenó que la menor quedara al cuidado de una de sus abuelas.

Esta semana se llevó adelante el juicio. María Fernando Álvarez, de 22 años, fue encontrada culpable de los delitos de lesiones graves y leves calificadas. Rubén Ceferino Altamirano, de 29 años y padre de la menor, fue considerado partícipe necesario de ambos delitos, y amboscoautores de lesiones leves calificadas.