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Por el cobre aumentó el robo de transformadores en zonas rurales

En los últimos meses ha aumentado el robo de transformadores en zonas rurales, una actividad delictiva que produce cortes e importantes pérdidas económicas a las empresas que distribuyen la energía. La Justicia investiga.

Policiales 08/07/2023 Tribuna Tribuna
POLICIALES Robo transformadores

El precio del cobre sigue en alza y mientras los países productores extraen el metal de las entrañas de la tierra, en varios sitios de Argentina, en cambio, alimenta una cadena ilegal que se vale del robo y del vandalismo para obtenerlo, afectando a las empresas que transportan y distribuyen los servicios de energía eléctrica y telecomunicaciones.

Desde hace varios meses se registra en todo el departamento Tercero Arriba el crecimiento de hechos de robo que tienen por objeto delictivo a transformadores de energía eléctrica de alta tensión en la zona rural.

Tanto la Cooperativa de Río Tercero como la de Almafuerte han denunciado este tipo de hechos y está en marcha una investigación que lleva adelante la Justicia.

Ocurre que lejos de ser hechos aislados, este tipo de robos se transformó en un dolor de cabeza para las empresas y para los clientes; produce pérdidas económicas importantes y graves perjuicios a los consumidores. Los casos más usuales están relacionados con la sustracción de los cables del tendido urbano, los gruesos cables tensados entre poste y poste que luego bajan hacia cámaras de distribución y cajas de medidores domiciliarios. Pero en ocasiones los golpes son más audaces. Cooperativas de la zona informaron que ya perdieron varios transformadores. 

Los hechos suelen ocurrir durante la madrugada, cuando hay menos movimiento en las calles y, además, hay menos posibilidad de que se advierta inmediatamente el corte de energía resultante de la vandalización.

En la ciudad
En abril pasado la Cooperativa de Obras de Río Tercero había expresado su preocupación por el robo de cables eléctricos, correspondientes a las “bajadas” domiciliarias, es decir el tramo que va desde la línea aérea hasta el pilar del medidor.

El material de esos cables es por lo general cobre, aunque hay algunos confeccionados con aluminio.

Varios casos fueron denunciados, todos ocurridos durante un fin de semana. Uno de ellos, que perjudicó a la empresa elaboradora de alfajores Renfor, quedó registrado en las imágenes de una cámara de seguridad privada. Allí se podía observar a una persona, sustrayendo el cable sobre la calle Estanislao Zeballos. Los empleados de esta industria, se dieron cuenta recién dos días después que no contaban con suministro eléctrico. Las heladeras, por ende, dejaron de funcionar comprometiendo la mercadería perecedera. 

El modus operandi de los ladrones es novedoso: se trata de personas que simulan ser obreros o técnicos que realizan reparaciones, con la indumentaria correspondiente y elementos (casco de seguridad, guantes y escaleras), trepan a los pilares y cortan las líneas con alicates, para luego robarlas.

En la zona rural    
Durante los últimos meses ha aumentado el robo de transformadores en zonas rurales, una actividad delictiva que produce cortes de suministro a clientes.

Desde las empresas afectadas se explica que este tipo de delitos se lleva a cabo de modo organizando, forzando la caída de los equipos. En cuanto a la metodología indicaron que se suben con escalera o se trepan a la plataforma donde están los equipos y los empujan al suelo. Cuando impactan, se rompen y se llevan el corazón del cobre. Eligen siempre operar de madrugada y en lugares alejados de la población, en zonas rurales.

Mercado negro
Esta modalidad delictiva, capaz de alimentar un importante mercado negro con fácil disponibilidad de dinero, incluye la intervención de tres sectores bien diferenciados. Primero, los sujetos encargados de la sustracción material del tendido de cables. Luego, los responsables de las distintas chatarrerías que operan como comercios legales y que compran en el mercado negro el material robado y lo almacenan. Y, finalmente, las fundiciones, talleres donde, a través de procesos metalúrgicos específicos, se separa el cobre del aislante que lo contiene para su posterior venta.

La Justicia lleva adelante una investigación y esta semana personal de la División Investigaciones de la Departamental de Policía junto a efectivos de la Patrulla Rural, realizaron un control en un local de compra-venta, ubicado en calle Quito, de barrio Aeronáutico, de Río Tercero. Durante el procedimiento se constató que en el lugar había planchuelas y placas de cobre -casi 92 kilos de este metal-, coincidentes a las utilizadas en los transformadores eléctricos de EPEC y la Cooperativa local.

Se secuestraron esos elementos, por creerlos relacionados a los hechos de robos ocurridos en la zona rural, denunciados por las cooperativas. No hubo detenidos pero fuentes ligadas al caso indicaron que la investigación continúa.

Antecedentes
El valor de los materiales que lo componen ha puesto en el foco delictivo a los transformadores eléctricos, siendo los situados en la zona rural los más expuestos como ya se dijo.

A mediados de enero pasado, la Policía secuestró en Almafuerte más de 400 kilos de cobre y diversos elementos, relacionados con una causa de robo de transformadores en la zona rural, en un procedimiento realizado en conjunto entre la Patrulla Rural Sur y efectivos de la brigada de investigaciones de la ciudad de Río Tercero.

Los efectivos realizaron cuatro allanamientos el mismo día y se secuestraron teléfonos celulares, cables de cobre de boninas de trasformadores y de media tensión (en un total de 478 kilos de cobre), elementos de bronce pertenecientes a transformadores, una pertiga y herramientas de corte de líneas.

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