En un juicio que culminó hoy en la Cámara del Crimen de Río Tercero, fueron condenados dos delincuentes que en 2020, tras perpetrar un robo en Almafuerte fueron protagonistas de una persecución policial que llegó hasta Río Tercero, incluyó disparos y terminó con ambos detenidos.

El juez José Argüello aplicó una pena de ocho años y nueves meses de prisión a Juan Manuel Deanquin (50), por hallarlo responsable de  los delitos de violación de domicilio y robo calificado por el uso de arma de fuego; y a  Luis Mario Sterin (48) a ocho años como  ser coautor de robo calificado por el uso de arma de fuego. 

Los hechos en los que ambos delincuentes -con frondosos antecedentes- estuvieron involucrados, ocurrieron el 21 de noviembre de 2020. A la 1.30 de aquel día se recibió un llamado en la comisaría de la vecina ciudad, alertando que se había activado la alarma de un local comercial dedicado a la venta de repuestos, ubicado en la esquina de Islas Malvinas y Entre Ríos. 

Al llegar al lugar, la Policía observó a dos personas que se encontraban en el interior del local. Los sospechosos corrieron hacia la parte posterior, logrando escapar por propiedades colindantes.
 
Se rodeó la manzana con los móviles policiales, cuando los efectivos los observaron salir rápidamente en una camioneta Ford Ranger. Se inició entonces una persecución por la calle Pedro C. Molina, ingresaron a barrio Pinares, con dirección a Río Tercero. Fue en ese lugar donde se produjo un intercambio de disparos entre los efectivos y los delincuentes. Los sospechosos continuaron hacia esta ciudad, ingresando a barrio Monte Grande, y tras recorrer varias calles de ese sector finalmente la policía pudo detenerlos.

Se secuestró la camioneta, una mochila que contenía una importante suma de dinero, y otros elementos.  

La Policía informó que en el local al que ingresaron a  robar se constató que habían dañado la alarma, forzando una ventana posterior y robando dinero en efectivo, además de otros elementos del comercio.

El hecho en el que estuvieron involucrados los dos ladrones oriundos de la ciudad de Córdoba, fue investigado por el fiscal Alejandro Carballo.