Como secretario de la comisión directiva del Club Sportivo 9 de Julio, a raíz de un informe publicado en este medio el sábado pasado, Oscar Toso, a cargo de relaciones institucionales, planteó respuestas a conceptos emitidos por diferentes personas por la no participación del club en la próxima Liga Provincial.

Réplica a Luchino
"Quiero aclarar en nombre del club comentarios que no nos gustaron y no son reales. Cuando Gastón Luchino dice que el club  está en una posición económica complicada, está hablando de la institución, y no de la actividad. El club no está complicado económicamente. El hecho de no hacer básquet significa una madurez institucional porque hay una estructura, un andamiaje institucional, en el que los deportes se ejecutan sobre la base que la comisión directiva delega en las subcomisiones la gestión económica y deportiva. El club no tiene ningún apremio económico. El personal está al día, con sueldo y aguinaldo, los pagos de servicio están al día, con refinanciaciones, no tenemos deudas de proveedores ni con personal. Estamos al día con la asamblea y balance y memoria. Institucionalmente es inobjetable la situación del club. Que diga que tiene un apremio económico, no es real", fundamentó Toso.

"No es el club el que financia la actividad básquet. Se delega en un grupo de trabajo, ya sea una subcomisión, para que ejecute ese deporte, pero no aporta los medios económicos. El aporte institucional es la personería jurídica, la responsabilidad social, los avales económicos, las instalaciones y los seguros, que son responsabilidad institucional. El dinero para la campaña se delega. Si no hay recurso económico, no hay campaña deportiva", amplió el dirigente.

De hecho, Toso indicó que Sebastián Papini, representante del básquet en comisión directiva, está encargado de asumir y saldar una deuda remanente del Torneo Federal pasado. "Hay una deuda porque los contratos de jugadores y cuerpos técnicos son a diez meses. Hay obligaciones contractuales como viajes, estadías y comidas que han sido financiadas. Papini, como miembro de la subcomisión de básquet y como integrante de comisión directiva, en grado de tesorero, es el responsable de cerrar el costo remanente del básquet por lo que resta del año", puntualizó.

"Queda cerrar las cuentas del Federal pasado y el ciclo económico de este año. El año que viene será otro año", apuntó.

“No hay zona gris”
"No hay ninguna zona gris en la venta de la plaza. El club tiene la asamblea, el balance y la memoria. Institucionalmente, hay una comisión revisora de cuentas. Hay una asamblea anual ordinaria que refrenda lo actuado y aprueba o no balances y memorias. Todos los actos institucionales en torno a esa situación fueron cumplidos al pie de la letra. No hay ninguna sombra de duda respecto a cuál fue la forma, el modo y el destino que tuvo la venta de la plaza de básquet de 9 de Julio, que no es una venta. En realidad, es un reconocimiento económico a una alianza deportiva hecha con San Lorenzo. Se hizo una alianza deportiva. Una vez finalizado el período de la alianza, se quedó por derecho, como está fijado por reglamento y estatuto de la Confederación de Básquet, con la plaza. Hubo una claridad total y absoluta", expresó el dirigente.

"No es la primera alianza deportiva. Si hay una retracción en cuanto a nivel competitivo institucional, es en base a los no resultados económicos. El club puede traccionar o los integrantes de la subcomisión de básquet en la medida en que los resultados económicos acompañen. La institución de ninguna manera puede soportar los gastos económicos que representa una campaña de un deporte. Comisión directiva atiende a la infraestructura, la legalidad e institucionalidad del club, no a un deporte", amplió. 

"9 de Julio hizo una alianza y el escudo no tiene por qué estar en la camiseta de San Lorenzo", añadió.

Réplica a la ABRT
Toso también respondió las declaraciones del presidente de la Asociación de Básquetbol de Río Tercero, Edgar Chiappero.

"Chiappero hace una consideración de que el club 9 de Julio recluta jugadores de la zona. 9 de Julio hace su campaña deportiva y finalizada la misma, devuelve a los jugadores a su lugar de origen o los cede a préstamo", explicó el dirigente.

"Si la región y la ciudad tuvieran la capacidad de hacer los aportes económicos necesarios, se vería. Pero como no se logra ese andamiaje económico, no se puede comprometer a un club a hacer una campaña deportiva de ningún deporte", manifestó.

"Lo que debiera ser un halago, termina siendo una crítica. ¿Por qué solo 9 de Julio tiene que asumir que es el representante de la ABRT? Es el único que se expone a una campaña deportiva (a nivel profesional). No hay una cabal idea de lo que significa eso: el transporte, el alojamiento, la organización de evento, la responsabilidad civil, los traslados, abrir estadios, acumular una cantidad de gente, es una responsabilidad institucional y civil enorme. Pero se fijan en que el club no ha podido juntar los recursos. Es demasiada crítica. Viéndolo desde el punto de vista institucional, no debería ser así. Es una cuestión de enfoque", cerró Toso, planteando su visión institucional.