Ferrer: "Logramos sostener los servicios indispensables en un año complejo"

En un año marcado por la complejidad económica nacional, el intendente Marcos analiza los logros de su administración, la reducción del gasto político y los proyectos de infraestructura y educación que buscan transformar la ciudad.

- ¿Cuál es el balance general que realizás de este año de gestión?

-El cierre de año nos deja un balance positivo. Arrancamos con expectativas altas y logramos concretar obras que proyectábamos hace tiempo, como la Plaza San Martín y la recuperación de espacios públicos en barrios como Castagnino. Logramos hitos importantes como pavimentar 11 cuadras en Villa Zoila y, fundamentalmente, cumplir el compromiso de alcanzar el 100% de iluminación LED en toda la ciudad. Sin embargo, no puedo ignorar que ha sido un año de un esfuerzo muy grande debido al complejo contexto nacional; si lo comparamos con un año de bonanza, no sería justo, pero dentro de esta realidad, le doy a la gestión un siete sobre diez.

-Se habla mucho de la necesidad de "ajustar" las cuentas. ¿Cómo se ha traducido eso en la práctica municipal?

-Hemos llevado adelante un achique del Estado muy profundo. Para que te des una idea, hoy funcionamos con 4 secretarios, cuando en la gestión anterior había 10. Además, hemos bajado aproximadamente 100 contratos, reducimos la planta permanente y la cantidad de becas. Hace poco más de un mes, les pedí a mis funcionarios un recorte del 30% en cada una de sus áreas. Es una medida difícil que puede afectar la velocidad de algunos servicios, pero es la única forma de gastar menos para sostener lo esencial y prepararnos para una reactivación económica.

-¿Qué tanto ha golpeado la crisis económica a la recaudación del municipio?

-El impacto es directo. Tenemos una caída de entre el 27% y 30% en la recaudación de la tasa al comercio, porque el consumo está totalmente "planchado". Al caer el consumo, cae la recaudación del IVA y de Ingresos Brutos, que son los fondos que la Nación y la Provincia nos coparticipan. Estamos todos los municipios atravesados por la misma situación, intentando sobrevivir con recursos propios mientras los ingresos principales se desploman.

-Ante este panorama económico, ¿cuál es la situación social y de salud en Río Tercero?

-La demanda social ha tenido un aumento fenomenal. Hoy estamos entregando cerca de 60 módulos alimentarios por día, y lo más preocupante es que es gente nueva que antes no le pedía nada al Estado. En salud, notamos que mucha gente se ha dado de baja de sus obras sociales y recurre a nuestras salitas. Aunque mantenemos un sistema sólido con profesionales y odontólogos, hemos tenido que mermar los subsidios para estudios de alta complejidad, como tomografías o resonancias, porque tienen costos astronómicos que hoy la caja municipal no puede cubrir.

-Mirando hacia el futuro, específicamente 2025 y 2026, ¿cuáles serán las prioridades en infraestructura?

-El foco estará puesto en la obra vial. Tenemos planeado avanzar con pavimentación y cordón cuneta en barrios como Cabero, El Libertador, y Marín Maroto. Una estrategia clave que vamos a implementar es el uso de adoquines, que nos cuestan un 30% menos que el asfalto. Esto nos permitirá armar cuadrillas propias, bajar los costos para el vecino y ejecutar las obras con mayor rapidez. También queremos terminar obras de gas en Cerino y cloacas en el barrio Aeronáutico.

Con 300 inscriptos en carreras tecnológcas, Ferrer señala que la Universidad Nacional de Río Tercero será un punto de desarrollo extraordinario para la ciudad.

-Respecto a los servicios, se viene la licitación de la recolección de residuos. ¿Qué cambios podemos esperar?

-El nuevo pliego exige que la empresa ganadora venga con una flota de vehículos 0 km, lo que debería llevar el servicio a un nivel óptimo. También prevemos empezar a trabajar más fuerte con la recolección diferenciada y el sistema de contenedores en ciertos sectores. Este año el servicio estuvo en unos 80 puntos sobre 100, y el objetivo es llegar al 100%.

-En el plano político, ¿cómo se prepara el radicalismo para la sucesión local?

-Estoy convencido de que vamos a presentar un candidato único y competitivo. Hay diálogo y sintonía entre quienes tienen aspiraciones; entienden que la prioridad es la continuidad del proyecto y no los egos personales. Mi mejor aporte para esa elección es terminar la gestión de la mejor manera posible, porque si tenés una buena gestión, la gente apoya la continuidad.

-A nivel provincial y nacional, ¿dónde se ve Marcos Ferrer en los próximos años?

-Acompaño a Rodrigo de Loredo porque creo que es quien está mejor preparado para la gobernación, pero para ganar en Córdoba hace falta armar un gran frente opositor que incluya a todos los sectores. En lo personal, me gustaría un perfil más vinculado a lo legislativo nacional en el futuro, aunque entiendo que en política los trenes pasan y hay que ver en qué momento subirse.

-Para cerrar, hablemos de la Universidad Nacional de Río Tercero (UNRT). ¿Cuál es su presente?

-Es un hito que cambiará la ciudad. Ya tenemos 300 inscriptos para carreras tecnológicas y el proyecto ya cuenta con la aprobación de la CONEAU. Muchos de estos chicos vienen de otras ciudades, lo que generará consumo y movimiento económico local. Estuve hablando con la ministra Pettovello para gestionar fondos para un laboratorio tecnológico propio, porque para las carreras que queremos dar necesitamos infraestructura de vanguardia.