Alejandra Pizarnik (1936-1972) es una escritora a la que prácticamente no se le conoce la voz, cuando se trata de interpretar textos propios o ajenos. En el único registro (público) que existe, la autora aparece recitando fragmentos de Escrito con un nictógrafo. El poema pertenece a su amigo Arturo Carrera y la intervención se realizó durante la presentación del libro, de nombre homónimo, en 1972. 

De todos modos, Pizarnik siempre está regresando en voces que elevan sus versos con la música. Este es el caso de Roxana Amed y Frank Carlberg, que acaban de publicar un disco basado en poemas de Alejandra Pizarnik. El álbum se llama Los trabajos y las noches -igual que un libro de la autora- y posee 11 temas cantados por Amed y musicalizados por el pianista finlandés. En contacto telefónico con TRIBUNA, la vocalista argentina habló de su pasión por esta figura de culto de las letras hispanas.
    
Segunda parte
Según menciona la gacetilla de prensa: “Los Trabajos y las noches incluye once piezas de orfebrería que atraviesan el mundo surrealista habitado por Pizarnik. Con un minimalismo sombrío y meditativo, cada tema se sumerge en los secretos de su poesía. Fue grabado en Estados Unidos, donde residen Amed y Carlberg, y cuenta con la participación de los notables Adam Kolker en saxo y clarinetes, Simon Willson en bajo y Michael Sarín en batería” señala el texto promocional. En realidad, este disco es la segunda parte que el tándem Roxana Amed-Frank Carlberg dedica a la escritora argentina. En 2012 editaron La sombra de su sombra (nominado a los Premios Gardel como Mejor Álbum Conceptual), también basado en Pizarnik, que contó con la participación de Christine Correa en voces. Más de una década después, los músicos abrevan otra vez en la autora, con poemas seleccionados de los libros Los trabajos y las noches (1965) y El infierno musical (1971).

Avellaneda blues
La portada del disco posee una fotografía de Fernando Solla, con diseño de Pablo Vallone y Daniel Arano. La imagen está tomada en un lugar de la parte sur de Buenos Aires, cerca de Avellaneda, sitio donde nació la escritora: “El fotógrafo es amigo nuestro y le pedimos que hiciera unas tomas de esa zona donde supo residir ella, para no usar algo arbitrario. También contactamos al familiar que administra la obra de Alejandra y nos otorgó la correspondiente autorización para usar los poemas, con mucha consideración y respeto”, señaló Roxana Amed a TRIBUNA.  Cabe aclarar que los textos fueron tomados del libro Poesía completa, publicado por la editorial Lumen, los cuales fueron impresos en Avellaneda, provincia de Buenos Aires. El disco Los trabajos y las noches tendrá su avant premiere en Joe´s Pub (Nueva York, Estados Unidos), el próximo 14 de agosto. En nuestro país todavía no hay fecha definida, pero en breve habrá novedades sobre la presentación en vivo.

Trayectoria
Roxana Amed es una artista nacida en Buenos Aires y radicada en Estados Unidos hace una década. Galardonada vocalista (con varias nominaciones a los Premios Latin Grammy), es productora, compositora y educadora. Su música fusiona las tradiciones folklóricas sudamericanas con el art rock y el jazz moderno, sin perder el toque argentino. Con Ontology (2021), obtuvo el Premio Gardel al Mejor Álbum de Jazz, siendo la primera vez que una mujer gana este galardón. Como se mencionó antes, el proyecto Pizarnik nace en 2011 cuando Amed conoció a Frank Carlberg: “Conociendo su interés por la poesía, le presenté los textos de Alejandra, esa voz inconfundible de la literatura argentina. A partir de ahí, él compuso las obras que incorporamos en La sombra de su sombra. Un tiempo después, él empezó a componer para el quinteto, lo que editamos ahora en Los trabajos y las noches. Pasó tanto tiempo entre un álbum y otro porque estuve haciendo una maestría por la que me habían becado y además trabajando con Ontology y Unánime, con mis discos solistas”, expresó la cantante.

La vocación literaria
Si bien, estudió música toda la vida, Roxana Amed también es graduada en Letras, con un posgrado en Literatura Española Contemporánea. Cuando descubrió los versos de Alejandra Pizarnik, la autora se convirtió en una de sus preferidas, pasión que terminó cristalizando en dos discos conceptuales. Con respecto al mundo académico de la literatura, la vocalista señaló lo siguiente: “Nunca estimulé demasiado mi presencia en el circuito literario, aunque me hubiera gustado hacerlo más. Siempre hablo de literatura y del lenguaje en mis campañas de promoción, en las aulas y en mi entrenamiento con cantantes. El trabajo textual es muy importante en mi tarea como autora de canciones, ya que es fundamental para un cantante la interpretación y comprensión del contenido de las obras. Para los que hacen canciones, es un desafío encontrar un discurso original y rico, evitando los lugares comunes. Otorgarles a las letras el valor de un poema, de una pieza poética”, expresó la compositora.

Frank Carlberg
El pianista finlandés Frank Carlberg agrega su visión de la escritora argentina: “La poesía de Alejandra Pizarnik es íntima, desgarradora, bella, penetrante y universal. Aunque su escritura parece tener un parentesco con las poetas rusas (Akhmatova, Tsvetaeva), tiene una expresión propia. Estoy agradecido con Roxana por presentarme el trabajo de Pizarnik, y estoy aún más agradecido de que haya aceptado prestar su notable voz a este proyecto. Su canto captura el tono de la poesía con mucha profundidad y belleza. Las palabras de la autora y la voz de Roxana, junto con la exquisita interpretación de Adam, Simón y Michael, han hecho de esta, una experiencia muy poderosa para mí”. 
    Un álbum que refleja fielmente la profundidad e inquietud de los versos de Pizarnik, una artista que tenía un destino marcado, el cual como ella misma lo vaticinó, era morir de poesía.