El "Colo" integrará el departamento de educación física del seleccionado argentino de básquetbol de sordos llamado "Los Topos", en el que Ariel Britos, extécnico de Sportivo 9 de Julio, se desempeña como entrenador. Con Papini, Río Tercero aporta talento y capacidad desde la formación al máximo nivel del básquetbol del país. "Siempre tuve curiosidad por esta selección y las que trabajan con miembros con capacidades diferentes", señaló.

El reconocido entrenador riotercerense Claudio "Colo" Papini se sumó al seleccionado argentino de básquetbol de sordos para trabajar en el departamento de educación física, un enorme desafío que le llega a los 57 años de edad.

"Siempre tuve curiosidad por esta selección y otras de otros deportes que lo hacen con miembros con capacidades diferentes. Me atrae porque es parte de mi sensibilidad, de lo que he hecho durante toda mi vida profesional desde que estoy en la actividad física y antes, siendo dirigente en un grupo scout. Siempre he tenido el enorme honor de trabajar con niños y personas de todas las edades con capacidades diferentes. Cuando surgieron estas posibilidades en lo deportivo, me interioricé, específicamente en el básquet", apuntó Papini sobre esta chance.

Papini compartió campus con Rubén Magnano, Fabricio Oberto, Emanuel Ginóbili y Rubén Wolkowyski, entre otros. Tiene vasta experiencia en el área y es un gran formador. También compartió vestuario con Luis Scola, actual capitán del plantel mayor de básquetbol.

"Conocí al entrenador, Ariel Britos, a quien tuvimos la posibilidad de tener un tiempo acá en 9 de Julio, compartiendo tareas en el cuerpo técnico. Me interioricé de la realidad de Los Topos, la tremenda falta de apoyo y colaboración que tiene la selección, y después llegó esta citación en la que me consideran que estoy capacitado para integrar el área de preparación física por mi trayectoria", amplió.

Papini registra un recorrido muy interesante en la formación del mini básquet. "Siento que estoy representando a mi país con este nombramiento. Ya empecé mi tarea con entrenamientos por zoom, hasta que podamos juntarnos con el plantel", señaló, antes de emprender una comunicación por esa vía con José Farías, de San Luis, dirigida a los jugadores sobre fuerza y la importancia de postura en la actividad física y prevención de lesiones.

"Estas charlas vienen con un proyecto que empezó antes de que me citaran. Hicieron una con el médico deportólogo y luego participé como invitado junto a Mario Mouche, preparador físico de la Generación Dorada, un amigo que tuve la posibilidad de traer a dictar una clínica a Río Tercero", detalló.

Los entrenamientos por ahora se realizan por zoom durante los lunes, miércoles y viernes. "La primera concentración será en San Juan. Estaremos una semana con el plantel y todo el cuerpo técnico para evaluar a todos los deportistas y entrenar de cara a las competencias que se reprogramaron para el año que viene", comentó Papini, aunque por la coyuntura sanitaria no hay fecha estimada para ese encuentro aún.

Papini y Scola

Asimismo, precisó que las competencias en carpeta incluyen el Torneo Sudamericano, el Preolímpico y un Panamericano. "Estoy muy entusiasmado. Es un enorme desafío. Ya estoy aprendiendo lenguaje de señas, que va a ser fundamental. Los jugadores me enseñarán mucho más cuando nos veamos", indicó.

Consultado por habilitación de prácticas, mencionó que en San Luis ya se trabaja con protocolos aunque la medida no se aplica en la mayor parte del territorio argentino. "Esperemos que sea pronto para poder prepararnos", reconoció.

Ante la falta de apoyo que manifestó, explicó: "En todo. Desde falta de indumentaria a los jugadores para tener el buzo que represente a la República Argentina, pagarse viajes, miembros de cuerpo técnico que se costearon gastos para estar presentes en torneos y lo que te puedas imaginar". Además de ese enumeración, mencionó que la selección no pertenece a la Confederación Argentina de Básquetbol (CABB), sino que se formó una Federación Argentina de Básquet para Sordos.

Papini con Rubén Magnano

"En algún momento, empezaron a intervenir miembros de la Generación Dorada apoyando a Los Topos. De ahí, se generó un cambio. Habría aparecido ahora una firma para proveer indumentaria y bolsos. Esos elementos se debían costear de manera propia antes", indicó Papini.

Por sumarse recientemente al plantel, el "Colo" admitió que está capacitándose también sobre diferencias que existen desde lo reglamentario y la comunicación, aunque avizora que pronto se habituará al lenguaje de señas, capacitación que ya está realizando.

"Me estuve interiorizando y son muy buena onda, se manejan con muy buen humor. Fue emocionante cuando me recibieron por zoom o chats de Whatsapp. Me han dado fuerzas y ganas. Transmiten muchas cosas y estoy feliz, honrado y privilegiado por pertenecer a este grupo", valoró.

Un largo recorrido
Papini lleva más de 30 años vinculado al básquet y recuerda que ha tenido en mini básquet a Pablo Prigioni, figura a nivel mundial. "Pasé por clubes de la ciudad y la zona, me convocaron a campus de básquet, eventos hermosos y brillantes, donde se puede trabajar con muy buen nivel, con gente de todo el país. Siempre hay referentes de selección argentina. He tenido posibilidad de contactarme con casi todos, desde entrenadores, utileros, médicos y jugadores de la Generación Dorada. Les debo un tremendo respeto por lo que hicieron deportivamente y porque, al conocerlos, ellos mismos me brindaron una confianza enorme, con mucho diálogo. Me siento privilegiado también de poder moverme en ese ambiente y no por estar con famosos y héroes del deporte, sino por la calidad de gente que uno conoció y sigue conociendo", describió Papini.

El "Colo" es un agradecido de la vida, desde el apoyo de la familia hasta la gente que fue cruzando en el camino apasionante del deporte.

"No me propuse haber estado en la selección. Uno quiere evolucionar siempre. Pero mi especialidad fue el mini básquet. Los entrenadores deportivos empezaron en lo formativo, la faz inicial. Creo que todos. Lo he hablado muchas veces con Rubén Magnano. Después le agarró el gusto a lo competitivo y vaya si creció. Yo elegí quedarme en el mini básquet, jamás lo dejaría porque es maravilloso trabajar con niños, esponjas que van absorbiendo lo que uno brinda", se sinceró.

"Necesitamos que ahí abajo estén los mejores. En las categorías iniciales, con los mejores elementos y las mejores canchas para entrenar. Ahí empieza la historia y la incorporación de técnica, táctica, ubicación en la cancha y desarrollo de todas las capacidades físicas y coordinaciones", destacó con el entusiasmo propio de alguien que adora el trabajo que realiza.

¿Y los gimnasios?
La pandemia complicó mucho la cuestión económica de quien cuenta con un gimnasio. "Ivana, con camillas separadas y cumpliendo distanciamiento social y protocolos, ya pudo largar con yoga y pilates. Pero hoy (por el jueves) fue un golpe duro que no habilitaran gimnasios", lamentó Papini sobre anuncios del gobernador. 

"No entendemos porqué (no se habilitan gimnasios), porque hay rubros habilitados que son de mayor riesgo por cercanía. Y además seguimos siendo zona blanca. Personalmente pienso que hay actividades que deberían ser autorizadas. Exigimos que se nos controle en los protocolos que presentamos", concluyó.

Desde la última semana, este notable entrenador de básquet riotercerense ha sido fichado por el país para sumar su sabiduría al más alto nivel en una más que merecida incorporación.