“La Argentina necesita recursos y el motor de la economía es el campo”

Locales 30 de julio de 2022 Por Tribuna
Entrevista. Sergio Busso, ministro de Agricultura y Ganadería de la Provincia
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El campo es sin dudas el mejor aliado del crecimiento y desarrollo del país, aún con las trabas y ataques que sufre por parte del Gobierno nacional. 

Ese concepto es particularmente comprendido en toda su dimensión, política y económica, por la administración provincial del gobernador Juan Schiaretti.

En ese sentido, el ministro de Agricultura y Ganadería Sergio Busso, reafirmó la posición de la Provincia sobre la eliminación de las retenciones, la producción de biodiésel y los proyectos que son necesarios para alentar al sector. 

Busso visitó la localidad de Corralito la semana pasada y dialogó con TRIBUNA. 

-¿Cómo evalúa la situación del campo?
   -Con mucha preocupación. Los productores y la gente en general, están viendo un contexto con muchas dificultades. No hay claridad en la macroeconomía, en las políticas para llevar adelante la toma de decisiones. Y el productor agropecuario es una persona que tiene que tomar decisiones todos los días. Sobre todo en estos días: avanzar pensando en la próxima cosecha gruesa. Con el levantamiento del maíz tuvimos muchas dificultades, aparecieron nubarrones tanto en el abastecimiento de gasoil, con la importación de fertilizantes, y con un marco de mucha incertidumbre en lo económico. El productor tiene que saber a qué atenerse, pensar cómo desarrollarse más allá del clima, y encuentra todos estos inconvenientes. Es un verdadero desperdicio la falta de posibilidades de llevar adelante una producción agropecuaria sostenida. Que es lo que necesita el país. La Argentina necesita recursos y el motor de la economía que puede generarlos es el sector agroindustrial o agroalimentario. Y es un sector que en lugar de apoyarlo lo están maltratando. En otros casos no se lo está estimulando ni apoyando. Han generado mucha desconfianza. Cuando no la hay se dificulta todo. Si bien el problema es económico, en el fondo es político. Al tener un gobierno que no genera esa confianza se producen  todos los problemas que hacen que el productor esté en una situación de muchas dificultades.

-Hay dos cuestiones que afectan al sector, que son las retenciones y el atraso en el tipo de cambio. ¿Cree que habrá cambios?
   -Tiene que haberlos porque si no desalentamos la producción. Siempre hablo de retenciones y algunos se enojan porque dicen que en un contexto de muchas dificultades restarle recursos al Estado nacional parece casi un despropósito. Pero no quiero dejar de decirlo nunca: las retenciones son una mala política. Se penaliza la producción. Son recursos que se van de nuestra provincia de Córdoba. Y si bien nosotros podemos plantear un criterio de solidaridad, no hay que naturalizar las retenciones. En países de la región, no tienen retenciones y no tienen una inflación tan alta ni tanta inequidad y desigualdad como nosotros. El problema no son los recursos de las retenciones que dejarían de estar. Hay un proyecto que han presentado nuestros diputados nacionales de Hacemos por Córdoba que plantea, en un articulado, ir disminuyendo las retenciones en forma gradual a cuenta del Impuesto a las Ganancias. Es el impuesto que hay que usar. El productor gana y hay que pagar Ganancias, pero si pierde es totalmente injusto que pague retenciones. En el caso de la soja, con el 36%, son recursos importantes que se van del bolsillo del productor que podrían estar invirtiendo para producir más. Que es en definitiva el objetivo que todos tenemos. Todos decimos lo mismo. Hay que producir más para exportar más. Para eso hay que generar políticas y condiciones de estímulo para que el productor tome decisiones en ese sentido.

-Más allá de este tipo de políticas que son resorte de la Nación, ¿cómo acompaña Córdoba al campo?
   -Siempre hemos planteado este tipo de cuestiones en el marco de Consejo Federal Agropecuario. Son totalmente injustas. Tratamos de plantear desde Córdoba que ojalá la política pueda encontrar un rumbo más o menos racional, para que no sigamos en este declive. Más allá de quien gobierne nadie quiere que al país le vaya mal. Necesitamos que esto cambie rápidamente. Si no se salta la brecha, como dice el gobernador, vamos a estar con estas dificultades. Son estos antagonismos que no le hacen bien a ningún modelo de país. Desde el Ministerio lo que hacemos es acompañar medidas que son de nuestra competencia. Por eso estamos generando condiciones objetivas de lo que el productor necesita: programas de infraestructura, de seguridad rural, consorcios de cuenca tratando de ordenar el territorio. Son planes, que tienen que ver con la sustentabilidad como son las buenas prácticas agropecuarias como la ley agroforestal. Nuestra agenda está vinculada a las competencias que tiene la provincia que son el cuidado de los recursos naturales y producir cuidando los objetivos de desarrollo sostenible. El concepto es que hay que ganar plata pero hacerlo cuidando el ambiente y con un fuerte compromiso social. Hay un desafío de poner valor agregado, mejorar los costos. La ley, por ejemplo, del biodiesel, de autoconsumo, tiene que ver con eso. Más allá de emigrar los combustibles fósiles hacia los combustibles bio, por una cuestión ambiental, tiene que ver mucho con lo económico. Si se usan combustibles bio estaríamos ahorrando el 30% si se compara con el precio del gasoil. Esto ayuda mucho. Tenemos allí una agenda importante entre todos los ministerios que formamos el gabinete productivo, en este trabajo conjunto entre lo público y lo privado. Todas estas políticas tienen que ver con la legitimidad propia que estamos generando con el sector privado.  Tener autonomía con el combustible es importante. Ya tenemos firmadas más de 20 plantas de biodiésel financiadas por el Banco de Córdoba, con cuatro empresas cordobesas que están llevando a cabo el desarrollo de estas plantas.         

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