En todo el mundo, los cementerios son testigos silenciosos de la historia de los pueblos. La línea de tiempo se puede trazar fácilmente en los cementerios, donde cada época queda congelada en su arquitectura, cultura e idiosincrasia.

Son famosas y muy valoradas, por ejemplo, las recorridas y visitas guiadas al Cementerio de la Recoleta, en la ciudad de Buenos Aires. Los relatos que se desprenden de quienes desmenuzan su historia y devenir, son apasionantes: desde los personajes que allí descansan, hasta la impronta edilicia de sus sepulcros. A menor escala, Río Tercero no es la excepción.

Y afortunadamente la inquietud de la arqueóloga Giselle Ragout, se transformó en una posibilidad concreta para que los vecinos de la ciudad puedan conocer lo que el cementerio municipal Nuestra Señora del Carmen encierra entre sus muros. Ragout encabeza todas las semanas visitas guiadas a la necrópolis local, en las que divulga su historia, sus curiosidades, los estilos arquitectónicos de sus bóvedas, quienes trabajaron en su construcción y los personajes sepultados, artífices de la historia de Río Tercero.

El cementerio fue declarado patrimonio histórico, arquitectónico y cultural. Las próximas visitas se desarrollarán los días miércoles 22, martes 28 y jueves 30 de enero desde las 9, en el ingreso  por la calle Igualdad.