Por su vocación de servicio ingresó a la Fuerza Aérea y ahora se destaca
Orgullo para la ciudad. Leonel Porres (22) es el abanderado de la Escuela de Suboficiales de la Fuerza Aérea Argentina, distinción que obtuvo por su mejor promedio académico, por las aptitudes militares y por tener una conducta intachable.
Leonel en diálogo con TRIBUNA contó: "Al terminar el secundario sentí una fuerte vocación de servicio y de ser militar, entonces empecé a averiguar y a buscar información sobre dónde podía estudiar y así fue como encontré la Escuela de Suboficiales".
El joven se encuentra cursando el segundo y último año de la carrera y se especializa en telecomunicaciones: "Elegí esta especialidad por que me gusta todo lo relacionado a la comunicación, y los sistemas y equipos de control de operaciones del tránsito aéreo", contó.
"Sé que no hay muchos jóvenes que sientan esta vocación militar. De hecho yo soy el primero de mi familia en hacer la carrera y la verdad es que no me arrepiento de mi elección, al contrario esto muy agradecido por la oportunidad que te brinda la escuela", dijo Leonel.
Los días en la escuela para Leonel y el resto de los integrantes son intensos. "Nos despertamos a las cinco y media y comenzamos con las actividades previstas para ese día, que incluyen actividad física, clases y la parte de la formación e instrucción militar", detalló orgulloso el joven.
Días atrás se llevó a cabo la ceremonia de asenso a Dragoneante Ayudante y participaron las autoridades de la escuela. A fin de año el joven egresa y espera ansioso la designación de su destino dentro de la Fuerza. "Me gustaría poder estar en la provincia de Buenos Aires donde se encuentra la base del equipo de operaciones, pero sea cual sea el destino que me toque estaré feliz porque es mi pasión", finalizó.