Propietarios y docentes de diferentes espacios de danza de Río Tercero volvieron a manifestarse para poner en conocimiento de la sociedad el complicado momento que atraviesan. Las escuelas de danza son uno de los rubros afectados por las nuevas restricciones en el marco de la pandemia de coronavirus.

"Alrededor de nuestros espacios sucede no solo la educación artística, sino también la participación escénica y todo lo que ella implica. A lo largo del año hemos estado expuestos laboralmente quedando en situación de total vulnerabilidad", señalaron a través de un comunicado de la Agrupación de Espacios de Danza (AED) Río Tercero .

Desde la agrupación indicaron que si bien durante los meses de aislamiento intentaron adaptar el trabajo a la virtualidad, "el esfuerzo resultó insuficiente ya que no solo es costoso contar con las herramientas necesarias -de ambas partes- sino que también son acotadas para las necesidades específicas de la danza".

Propietarios y docentes de estos espacios indicaron que estuvieron muchos meses sin trabajar, tiempo durante el cual debieron seguir afrontando pago de alquileres e impuestos de los salones donde desarrollan su actividad. "Este tiempo no solo ha sido de estancamiento económico, sino de pérdida y empobrecimiento de nuestro bolsillos", resaltaron.

Si bien indicaron que sostienen su "compromiso con la salud pública", han permanecido con la puertas cerradas primero y luego una vez habilitados respetando los protocolos, requirieron que se los "tenga en cuenta en el diseño de políticas públicas que reconozcan la importancia del circuito económico" que conforman.

"Los establecimientos de danza necesitamos que la ciudad conozca nuestra preocupante situación. Seguiremos unidos en el camino de una ley federal que nos contemple", afirmaron y bregaron por que se arbitren las medidas para sostener las fuentes de trabajo.