Por si hay que pasar el verano en casa, creció la instalación de piscinas

Locales 26 de septiembre de 2020 Por Tribuna
Mejorar las condiciones del hogar se transformó en prioridad para familias que observan cómo se acercan las vacaciones y se alejan las posibilidades de viajar. En este contexto, las consultas para contar con un espacio donde refrescarse puertas adentro, tuvieron un ritmo inédito este año.
LOCALES - Piscina

Llega esa época del año en que muchos comienzan a pensar en sus vacaciones, pero la compleja situación sanitaria y restricciones para circular conspiran contra cualquier plan al respecto.

A pesar del contexto, será inevitable que en algún momento, la necesidad de “desenchufarse” por algunos días, se torne una prioridad.

Pero si viajar sigue siendo más una ilusión que una posibilidad concreta, acondicionar el hogar para la llegada del verano pasa a ser un válido “Plan B”.

Ante esta inevitable preponderancia de “vacaciones domésticas” la venta de piscinas ya viene alcanzando un volumen inédito.

Naturalmente, el deseo de prepararse para pasar mayor tiempo libre en casa, debe estar respaldado con una posibilidad económica, pero la falta de alternativas de consumo que trajo aparejada la extensa cuarentena, también contribuyó con este fenómeno.

Aunque la pérdida de trabajos o poder adquisitivo también abarcó a buena parte de la población, quienes mantuvieron su nivel de ingresos o tienen ahorros parecen bastar para sostener una demanda inusitada.

Más allá de un mayor volumen de ventas, lo que se observa este año es que las consultas para incorporar una pileta al patio de la vivienda, comenzaron un par de meses antes, según advierten los comerciantes.

Si por lo antes descripto, la situación no cambia, todavía resta sumar más clientes que busquen  refrescarse en casa.

Lucio, de la empresa Gottas, estima que la venta de piscinas está hasta un 50 por ciento por encima de años anteriores.

“Normalmente, las consultas arrancan en julio pero este año, se adelantaron dos meses, ni bien liberaron un poco la cuarentena”, repasa.

La demanda actual ha provocado que las demoras para colocarlas ya superen el mes.    Luego, la instalación en sí, desde la perforación hasta la colocación de losetas, no se demora más de tres o cuatro días.

Igualmente, Lucio advierte sobre constantes subas de precios dado que gran parte de los insumos son importados y están naturalmente atados a la evolución del dólar.

Los clásicos modelos rectangulares de fibra de vidrio de aproximadamente seis metros de largo, dominan ampliamente el mercado actual, según coinciden en afirmar referentes del rubro.

Para tomar sol o que jueguen los más chicos, se está imponiendo la denominada “playa húmeda”, una superficie de escasa profundidad que abarca aproximadamente un metro al ingreso de la piscina.

Aunque depende de la cantidad de accesorios, quien quiera dar este salto de calidad en su casa deberá contar con no menos de 300 mil pesos.

A su vez, quienes cuentan con dólares pueden dotar de esta mejora a su hogar, por la mitad del valor que tenía hace pocos años.

La fibra de vidrio se ha impuesto notablemente y no solo por una cuestión de costos y tiempos, sino de mantenimiento.   Desde Gottas, afirman incluso que han reemplazado varias piletas construidas de la manera tradicional, ya que son difíciles de remediar si tienen algún defecto en la construcción.

Walter, representante en la región de la marca Indusplast, va más allá en su análisis de esta situación de consumo. “La gente está invirtiendo todo lo que puede en algo que quede para su casa, pero no solo con piletas, sino también en trabajos de albañilería, pintura, muebles y hasta paisajistas”, comenta.

Según precisa, actualmente están colocando unas seis piletas por semana aunque observa que el pico de la demanda quedó atrás.

“Nuestra temporada baja fue alta, las consultas comenzaron en abril y durante dos meses hubo como una psicosis, ahora se calmó pero la gente sigue concretando instalaciones”, comenta.

Walter estima que de mantenerse esta tendencia, cerrarán el año con un 40 por ciento más de ventas pero tiene dudas en torno a la provisión de insumos importados, como por ejemplo el cemento blanco usado en las losetas, resinas o componentes de los equipos de filtrado.

Una cautela similar muestra José Luis, de Tecnipiscinas, quien prevé una posible falta de abastecimiento para atender la demanda, teniendo en cuenta que la mayoría de los componentes de piscinas provienen de China.
Según estima, este movimiento inusual del mercado debería mantenerse por al menos dos meses más.

No obstante, sostiene que el acceso a la piscina propia sigue siendo complicado para la mayoría de los asalariados y que el principal “target” está dado porque quienes acostumbraban a viajar y ahora dudan de poder hacerlo en el corto plazo.

“Quienes cuentan con algunos ahorros ven cómo su dinero se desvaloriza y buscan invertir en la casa. Es cierto que hubo un boom pero hay que ver como sigue porque depende de varios factores, esperemos que no sea solo un veranito”, desea José Luis.

Si bien esta empresa también construye piletas de material, su representante reconoce que cada vez son menos frecuentes, salvo cuando forman parte de la obra general de una nueva vivienda, generalmente de alta gama. Sus costos se elevan en un 60 por ciento y pueden demandar hasta 

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